El español Fernando Alonso prepara su asalto al Dakar. El bicampeón del Mundo de F-1 con Renault, campeón del Mundial de Resistencia y vencedor de las 24 Horas de Le Mans y Daytona con Toyota, deja los circuitos cerrados de asfalto para probarse a si mismo sobre las dunas de arena, en un coche de 'raids' y con un copiloto al lado. Faltan algunos detalles administrativos y contractuales, pero si nada se tuerce en el último momento, el 'Nano' anunciará, la próxima semana, que disputará el próximo Dakar, el del 2020, en el inicio del año en Arabia Saudí al volante un Toyota Hilux.

"Tengo una idea clara de lo que voy a hacer, no dejo puertas abiertas ni estoy esperando o buscando que me llame nadie. Siempre he elegido dónde y cuándo quería correr, porque me muevo en base a lo que me hace feliz, ha vuelto a explicar el asturiano, de 38 años. Hay un proyecto en marcha que me llena y que voy a anunciar muy pronto. insiste. Hay algunos temas contractuales y de derechos de imagen que aún deben afinarse por parte de Alonso, Toyota, el gobierno saudí y ASO, el grupo que edita el diario deportivo francés 'L'Equipe', organizador del Tour de Francia y otras muchas carreras ciclistas y también del Dakar. Además, Toyota ha pedido al propio Alonso retrasar cualquier anuncio a fechas posteriores al Rally Finlandia, de especial trascendencia mediática para el gigante de la automoción y que se disputa, precisamente,este fin de semana.

La idea nace en Abu Dabi

La idea comenzó a gestarse en noviembre pasado, en el 'paddock' de Abu Dabi, durante su última carrera de F-1. Quiero hacer algo que nadie haya hecho antes en la historia del automovilismo, ha repetido Alonso, desde entonces, en muchas ocasiones. Ganar el Mundial de F-1 y el Mundial de Resistencia fueron el inicio de ese camino. Después de ganar el GP de Mónaco de F-1 y las 24 Horas de Le Mans en resistencia, tan solo le faltan las 500 Millas para completar la Triple Corona. Estuvo a punto de ganar la icónica carrera de la Indy en 2017 con la escudería Andretti, y volvió a la carga, el pasado mes de mayo, con un proyecto de McLaren que resultó un desastre.

Alonso tiene claro que volverá al óvalo de Indianápolis en algún momento, pero con un equipo ganador. Desde luego no está muy interesado en hacer toda la temporada con McLaren en la Indy. Aprendimos mucho de la última edición. Cometimos muchos errores. Ahora queremos volver pero hacer toda la temporada, y Fernando es nuestra primera opción, explicó el jefe del grupo McLaren, Zak Brown, la pasada semana.

ASO, Toyota y el Gobierno saudí

Pero al asturiano no le atrae una temporada entera en la Indy, y menos con McLaren. No se le veía tan cabreado desde la F-3000, hace 20 años, cuando tuvo que hacer frente a un rosario de errores de concepto, de ejecución y hasta de traducción al volante de un McLaren con el que ni siquiera pudo clasificarse. Volverá a las 500 Millas sí, pero solo para la carrera y enrolado en un equipo ganador. Y ese proyecto, de momento, figura a medio plazo. Lo siguiente es el Dakar. Y en ello está.

Una embajada del gobierno saudí se entrevistó con Alonso en Estados Unidos, precisamente, la semana de las 500 Millas. Allí le convencieron de participar. El Dakar deja suramérica tras una década y se traslada al desierto de Arabia, y el gobierno de Rihad quiere provocar la máxima atención mediática. Nada mas finalizar las 24 Horas de Le Mans, Alonso viajó a París para entrevistarse con Yann Le Moenner, el director general de Amaury Sport Organisation (ASO), la empresa francesa propietaria del Dakar. No era la prímera vez. Cuando intentó poner en marcha un equipo ciclista, a partir del Euskatel, visitó varias veces a Le Moenner en París.

En esta última reunión se trataron temas contractuales, derechos de imagen, y también la constatación de que el recorrido del 2020 se basará en dunas en un 80%. El pasado 28 de marzo, Alonso realizó una prueba en el desierto de Suráfrica con el Toyota Hilux que ganó el Dakar-2019 a los mandos del jeque catarí Nasser Al Attiyah, el mejor especialista en dunas. El piloto surafricano Giniel de Villiers, experto conocedor del Dakar y ganador de la edición 2009, fue su instructor en esos entrenamientos privados.

Alonso-Sainz, el gran duelo

Las pruebas privadas serán la base del entrenamiento de Alonso hasta que debute, probablemente, en el Rally de Marruecos, el próximo mes de octubre. El rally servirá para comenzar la adaptación con el copiloto que Toyota ha escogido para el 'Nano', que será Álex Haro. El catalán fue campeón mundial de rallys en la categoría SWRC en 2010, en el asiento de la derecha de Xevi Pons, con un Ford Fiesta S-2000 pero, en los últimos años, ha alcanzado la excelencia como navegante de 'raids', primero con Albert Llovera y, después, con Nani Roma, con quien finalizó segundo del Dakar del año pasado, donde completó las últimas etapas con tres costillas rotas. Es junto a Lucas Cruz, el copiloto de Sainz, lo mejor en navegantes del Dakar.

Y sí, las dunas de Arabia escenificarán el mano a mano de los fenómenos de la historia del automovilismo español. Carlos Sainz, bicampeón del mundo de rallys y dos veces vencedor del Dakar, frente a Fernando Alonso, bicampeón del mundo de F-1, campeón de Resistencia y vencedor de Le Mans y Daytona. Un auténtico duelo al sol, roedados de los mejores 'pistoleros', entre otros, el catalán Roma (ganador en 2014 y segundo en 2019) , Al Attiyah (tricampeón) o Stéphane Peterhansel, conocido como 'Monsieur Dakar', vencedor 13 veces del maratoniano rally.

Un equipo ganador

David Castera, el nuevo director del Dakar, se mordía la lengua en la Baja Aragón de la semana pasada para no demostrar su alegria por el relanzamiento que puede significar para el ligeramente aletargado Dakar su paso a Arabia y la participación de Alonso. No puedo decir nada, insistía mientras los ojos le brillaban. Tiene equipo, porque Toyota es el último ganador y, desde luego, capacidad para ganar. Si él se lo propone podrá ser muy competitivo, pero nadie le puede pedir que gane el Dakar el primer año, eso es dificilísmo, dijo, hace algunas semanas, Nani Roma.

Sainz espera al asturiano con ganas de batirle en duelo impactante: Compartir el Dakar con Alonso puede ser un factor a favor. Somos amigos, así que compartir tantos días con Fernando haría a este Dakar más divertido que cualquier otro, explica el madrileño antes de darle un último consejo: "Él no es tonto, ya lo ha probado y sabe que es una especialidad complicada y donde la experiencia es fundamental, así que el consejo es fácil: kilómetros y carreras".