EL PILOTO ASTURIANO apenas pudo atender a los centenares de aficionados que se agolpaban tras unas vallas en el pit lane del Circuito de Cataluña y tuvo que recogerse en su garaje por la avalancha de seguidores que esperaban a su ídolo. La organización del GP de España espera que el domingo haya 90.000 aficionados en el circuito.