Una vez superada con nota la prueba danesa, a España le queda ahora otra duro obstáculo, el de tener que pasar cuatro días en Finlandia para disputar el miércoles un amistoso contra este combinado, con cuatro partidos de la octava jornada de liga programados para el sábado 20 de octubre.

La selección se ha oxigenado en el momento más oportuno. Los hombres de Luis Aragonés vencieron y convencieron ante Dinamarca y han puesto pie y medio en la Eurocopa de Austria y Suiza, pero una vez tranquilizados los ánimos definitivamente, lo lógico hubiese sido volverse a España para que los futbolistas se pongan a trabajar con sus equipos con vistas a la próxima fecha del campeonato doméstico.

Es cierto que el calendario internacional y los partidos amistosos están diseñados desde hace tiempo y que la Federación necesita hacer caja con los amistosos, pero Luis se encuentra ahora con el problema de decidir a quién va a alinear el miércoles en un partido intrascendente y con un clima y un terreno de juego hostiles por las bajas temperaturas que sufre Finlandia en el comienzo del otoño.

Villarreal-Barcelona, Espanyol-Real Madrid, Deportivo-Valencia y Levante-Sevilla son los encuentros de la octava jornada programados para el próximo sábado y muchos de los jugadores de esos equipos no se podrán poner a las órdenes de sus entrenadores hasta el jueves por la tarde.

Para Luis será un engorro tener que decidir si juega, por ejemplo, Carles Puyol, ausente en el duelo ante Dinamarca. Si lo hace, estará expuesto a una lesión y, si no, habrá estado diez días alejado de su equipo para no jugar ni un solo minuto con España. Y lo mismo ocurre con el resto de futbolistas. Lo lógico es que el técnico decida dar descanso a los titulares. En ese caso ¿qué hacen en Helsinki siete futbolistas del Valencia, tres del Barcelona, tres del Espanyol y dos del Real Madrid?.

EL PROTAGONISTA Raúl Albiol, defensa del Valencia que debutó el sábado con la selección española, dio un nuevo y brillante paso en una carrera futbolística que inicio dramáticamente tras un accidente de tráfico sufrido en agosto de 2004.

Albiol, de 22 años, formó parte del equipo titular que se impuso por 1-3 a Dinamarca en Aarhus en el importante partido que disputó la selección española el sábado, valedero para la clasificación para la Eurocopa de 2008.

Estos momentos de máxima felicidad que vive el jugador de Vilamarxant (Valencia) contrastan con la trágica experiencia que vivió el espigado futbolista del Valencia el 2 de agosto de 2004 y que incluso pudo costarle la vida. Albiol sufrió un accidente de tráfico aquel día en el kilómetro 86 de la Autovía A-3 (Madrid-Valencia), a la altura de Tarancón (Cuenca), cuando se dirigía a Madrid para firmar el contrato de cesión con el Getafe, junto a su padre y su representante.

Una salida de la calzada del vehículo en el que viajaban causó graves heridas en Albiol, mientras que su padre resultó ileso y su representante herido leve.

El jugador internacional del Valencia, que tenía entonces 18 años, ingresó en la UCI del hospital y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en dos ocasiones, en una de las cuales le fue extirpado el bazo. A pesar de esteserio contratiempo, Albiol firmódesde el hospital su contrato decesión con el Getafe.

Tres meses después, el 8 de noviembre,Raúl Albiol entraba enla recta final de su recuperaciónal afrontar su primer entrenamientocon el equipo madrileño,mientras que menos de un mesdespués, el 4 de diciembre, entrópor primera vez en una convocatoriacon el conjunto madrileñocon el Levante como rival.

Su recuperación fue tan brillanteque en aquella campaña,la 04-05, el jugador valencianoparticipó en junio de 2005 en elMundial sub’20 de Holanda conEspaña tras una brillante trayectoriaen la primera mitad del añocon su equipo.

Precisamente, su buen rendimientoen el club madrileño leabrió las puertas del Valencia enla siguiente temporada (05-06)con un notable debut que le llevóa participar en 29 partidos de laLiga española.

La noche del sábado pasará alcurrículum de Albiol como unade las más importantes en su carrera,no sólo por tratarse de sudebut sino por el hecho de que elequipo nacional lograse una importantevictoria en la carrerapor clasificarse para la próximaEurocopa. Además, en los durosmomentos que vivió en 2004 nadahacía presagiar que tres añosdespués viviría una noche así.