Otra final más -la enésima esta temporada- para el Cáceres Patrimonio, en este caso en Melilla en la antepenúltima jornada de la LEB Oro. Pero pase lo que pase mañana sábado en el pabellón Javier Imbroda (19.00 horas, LaLigaTV), seguirá habiendo vida. Si los verdinegros ganan, el paso hacia la permanencia podría ser incluso definitivo. Si pierden, aún tienen por delante dos partidos más para tratar de enderezar el rumbo.

Semana de penitencia en el Cáceres, por la ocasión que se escapó el pasado viernes en el Multiusos ante el Ourense y por las dificultades para entrenar. Hasta la tarde de este jueves no ha podido entrenar al completo toda la plantilla. Pequeños problemas han provocado que cada día faltaran algunos jugadores. «Pero no es excusa», como se encarga de recordar el técnico Roberto Blanco, que para mañana espera tenerlos a todos disponibles. El equipo viaja hoy, por lo que a diferencia de años anteriores no deberá encarar el partido tras un largo desplazamiento en el día. Y será un factor importante en una cancha que históricamente se le ha dado muy mal a los verdinegros.

La presión sí puede ser un factor clave. Y con ella tendrán que lidiar los dos contrincantes. Los cacereños porque luchan por la supervivencia en la categoría y los melillenses porque aún tienen que asegurar su plaza de playoff, acumulan cuatro derrotas consecutivas, dos de ellas en su cancha, una ‘lógica’ ante el Betis y otra más sorprendente contra el Prat (72-88), rival directo de los extremeños por la permanencia

Lidiar con la presión no debe ser ya un problema para un Cáceres que convive con ella desde hace muchas semanas. Ahora al menos depende de sí mismo para conservar la categoría. «Es cierto que conforme se acerca al final la presión aumenta», reconoce el preparador, seguro de que serán capaces de controlarla.

No sabe Roberto Blanco qué Melilla se encontrará hoy, si el que fue capaz de encadenar siete victorias seguidas o el que perdió en casa de 16 ante el Prat. «No sabemos cómo estarán», aseguraba ayer. Aunque eso no será lo prinicipal. Lo principal es el propio Cáceres. «Yo solo pienso en nosotros, en seguir la línea de los últimos partidos; si jugamos como el viernes, podemos ganar los tres partidos».

En Melilla asegurán que Juan Rubio es baja segura, mientras que Txemi Urtasun será duda hasta el final.

OTRO PARTIDO CLAVE / Clave es para el Cáceres su partido de mañana y también el duelo del domingo entre Real Canoe y Prat (19.30 horas). «Las combinaciones de partidos directos dirán si son uno o dos», explica Roberto Blanco cuestionado sobre el número de victorias necesarias para la permanencia. «Puede ser uno, pero es muy difícil; con dos estará más cerca. Los partidos directos van a ser clave». Y de esos tendrá uno el Cáceres en la última jornada ante Canoe. Antes de iniciar el partido en Melilla los verdinegros ya sabrán qué ha hecho el filial del Barcelona, con el que está empatado a nueve victorias, que recibe a un Palma que quiere asegurar el factor cancha para el playoff.