La I Gala Internacional de Taekwondo Cáceres 2016 consiguió lo que pocos deportes logran en la capital cacereña: llenar prácticamente el pabellón Municipal Serrano Macayo. Este arte marcial, que cuenta con numerosos adeptos en la región desde que llegó a principios de los 80 de la mano del maestro Kim Young Goo, hizo las delicias de los espectadores, que siguieron con atención las competiciones y la fase de competición pese al fuerte calor que se percibía en el recinto.

El espectáculo estaba garantizado. Especialistas de toda la región --Valencia de Alcántara, Almendralejo, Mérida, Plasencia, Cáceres, Badajoz, Plasencia y Navalmoral-- y de varias comunidades españolas --Madrid, Castilla La Mancha, Castilla y León y Aragón-- se unían a la presencia de varios maestros procedentes de Corea, el país en el que nació el taekwondo. En el palco hubo incluso representación del consulado en España.

La capital

El propósito era promocionar el deporte en Extremadura y se consiguió. España es la primera potencia europea y segunda a nivel mundial.

Cáceres se ha convertido durante los últimos años en la capital del taekwondo en el suroeste de la península. Ya ha acogido en anteriores ocasiones el Campeonato de España cadete y la Copa del Embajador, con la enorme influencia de Kim siempre presente. El venerado maestro, presidente de la Federación Extremeña y propietario de un concurrido gimnasio en Cáceres, prefirió esta vez dejar el palco y se puso el kimono para organizar a pie de pista las distintas fases del evento.

"Para mí es muy especial que haya tanta gente siguiendo el taekwondo en Cáceres y en Extremadura. Me gustaría algún día devolver a esta tierra todo lo que me está dando a mí", afirmaba entre reverencia y reverencia. El respeto y la tradición, conceptos fundamentales en el taekwondo, se expresaron una y otra vez entre los competidores.