La junta directiva del Real Madrid, presidida por Florentino Pérez, reunida ayer en el estadio Santiago Bernabéu, mostró su total respaldo a la labor del actual entrenador, Vanderlei Luxemburgo, a la vez que dejaron claro que en ningún momento se ha planteado su destitución.

En el encuentro del miércoles contra el Olympique de Lyon parte de la afición mostró su descontento con algunas decisiones del técnico brasileño y no dudaron en silbar y abuchearle hasta el pitido final.

El empate del miércoles, unido a la derrota contra el Barcelona del pasado sábado (0-3), habían puesto en el disparadero al preparador brasileño, que sin embargo ayer fue respaldado por su presidente y la junta directiva blanca.

Con este respaldo, Luxemburgo volverá a pasar una prueba de fuego el próximo domingo en Anoeta en el encuentro que disputarán los madridistas contra la Real Sociedad, tras ponerse a cuatro puntos del líder, el Barcelona, con la derrota del pasado fin de semana.

En la junta directiva de ayer tarde se abordó la situación deportiva del equipo además de analizar el reciente acuerdo de patrocinio con la marca BenQ-Siemens, que a partir de la temporada 2006/2007 publicitará la camiseta del Real Madrid.

También se trató el acuerdo de colaboración del Real Madrid y el Grupo Citic, a través de su filial Citic Guoan, por el cual el Real Madrid prestará apoyo deportivo, tecnológico, comercial, estratégico y de gestión para el desarrollo del club de la capital china Beijing Guoan y del fútbol chino, informa Realmadrid.com. Por su parte, el Grupo Citic apoyará el desarrollo de la marca Real Madrid en China.

LA OPINION DE DIOGO El lateral uruguayo analizó el momento por el que atraviesa su entrenador Vanderlei Luxemburgo y reconoció que no le ve "con rostro preocupado".

Diogo fue la gran novedad de Luxemburgo en el partido de Liga de Campeones que el Real Madrid empató ayer ante el Olympique de Lyon. Míchel Salgado fue el damnificado por la derrota ante el Barcelona y el lateral uruguayo entró en el equipo titular.

Ayer defendió a su técnico de la lluvia de críticas que está recibiendo y manifestó la intención del vestuario de corregir la situación con un triunfo el domingo en San Sebastián. "El míster está alegre, no le veo con rostro de preocupación. Estamos tranquilos. Hay que ganar para seguir mirando arriba", argumentó.

"Para Luxemburgo es una ocasión complicada porque depende del resultado, pero se dicen muchas cosas y se habla demasiado. Nosotros tenemos la mente clara para volver a arrancar por el buen camino", agregó.

POLEMICO CAMBIO La afición madridista pitó a su entrenador cuando cambió a David Beckham, lesionado, por Míchel Salgado, en vez de por un delantero como Roberto Soldado, cuando iban 1-1. Diogo dio su versión de lo ocurrido.

"El mister debe tener su razón, yo lo que puedo decir es que vi a David muy dolorido. En un par de jugadas agarrándose la espalda, le noté con mucho dolor. Tendría sus razones para hacer el cambio", dijo.

Diogo recordó los últimos acontecimientos de su carrera negativos tras caer con su selección, Uruguay, en la repesca al Mundial y regresar a una mala racha con el Real Madrid. "En lo personal la semana pasada fue terrible. Y ayer el equipo jugó bien en el primer tiempo, defensiva y ofensivamente, pero en el segundo fue distinto", dijo.