Siete jugadores, ningún problema. El pistoletazo de salida del nuevo Cáceres se dio ayer con una norma habitual: los inevitables reconocimientos médicos avalaron la buena salud de tres cuartas partes de la plantilla que entrenará desde mañana Ñete Bohigas.

Fue en la Clínica del Deporte del doctor Angel Martín, médico del club, a primera hora de la mañana. En medio de un muy buen ambiente, se pudo comprobar que todos llegaban en buenas condiciones.

Los bases José Antonio Marco y José Antonio Medina; los aleros Carlos Ferreiro, Luisma Parejo y Juanma Ruiz; y los pívots Miguel Angel Conejero y Javier Carter pasaron revista. Se esperaba al estadounidense Kelsey Williams, que finalmente no llegó por un problema con el vuelo, aunque se le esperaba a última hora de la noche.

Hubo bromas entre los que se conocían. La juventud de la plantilla que se está confeccionando juega a favor del grupo, que espera conseguir los mejores resultados. Tras los reconocimientos médicos y el descanso, la cita estará hoy en otro clásico: la visita a la ciudad monumental.

A partir de mañana, el escenario variará con el inicio de los entrenos en El Cuartillo y en el Multiusos. Ahí empezará realmente lo serio.