El seleccionador nacional de fútbol, Luis Aragonés, manifestó ayer, al término de su declaración ante el juez que instruye el expediente disciplinario por sus manifestaciones previas al amistoso España-Inglaterra, que le ha pedido "que sea lo más justo posible".

"El instructor se ha dedicado exclusivamente a preguntar. Ni debo ni puedo decir nada de lo que me ha preguntado, pero sí le he pedido que sea lo más justo posible. El dictamen que sea lo que sea, pero que se acabe cuanto antes", declaró el seleccionador, que dijo sentirse "completamente inocente".

EXPEDIENTE El Comité de Competición de la Federación Española decidió abrirle un expediente disciplinario, a instancias de la Comisión Nacional Antiviolencia, por sus comentarios previos al amistoso España-Inglaterra, el 17 de noviembre, que fueron interpretados como racistas.

El seleccionador mantuvo antes del mismo un enfrentamiento dialéctico con los medios de comunicación ingleses sobre racismo y un sector del público mostró durante el encuentro una actitud racista con los jugadores de raza negra del equipo inglés, lo que provocó las protestas de las autoridades inglesas.

"Estoy tranquilo desde el primer día porque es un tema de conciencia. He tenido jugadores y tengo amigos de distintas razas y etnias y he tenido un apoyo fundamental en lo referente a mí, pero no me gusta ser juzgado por que me quieran hacer pasar por lo que no soy", añadió.

Aragonés lamentó que hayan aparecido publicadas declaraciones "de gente que pueden ser partidistas". "Cuando uno en su vida particular está siendo juzgado cualquier comentario puede ir tanto a favor como en contra, pero lo acato y deseo que termine", añadió.