Nadie sabe, a ciencia cierta, si José Mourinho ha llegado al Real Madrid para tratar de sacarse de encima esa fama de resultadista sin buen fútbol que le persigue a lo largo de su triunfal vida como entrenador. Una cosa está clara: Florentino Pérez lo ha fichado, contra la opinión de Jorge Valdano, para que gane títulos. Se ignora si el presidente blanco le ha pedido que lo haga con buen juego, fútbol vistoso y espectáculo del bueno.

Hay quien piensa que ese es el estilo de Mou y, por tanto, va a ser muy difícil que alguien que no tiene la sensación de jugar a la defensiva, al contragolpe, rechazando descaradamente la posesión del balón decida cambiar de criterio al llegar al Bernabéu. Otro hecho que es evidente es que los rivales ya han empezado a recordar el estilo del técnico portugués. De ahí que ayer, antes de que la plantilla se citase en un céntrico restaurante de Madrid para celebrar su primera comida de hermandad de cara al inicio de la temporada, Alvaro Arbeloa saliese al paso de unas declaraciones de Piqué en las que el central azulgrana dudaba de que el nuevo Real Madrid juegue este temporada al ataque.

NUEVO ESTILO "Jamás se nos puede tildar de equipo amarrategui", señaló ayer Arbeloa, que recuerda la historia del Real Madrid, siempre ligado a un juego ofensivo, el único con el que se pueden conseguir las victorias sumadas por el conjunto madridista. "Podemos jugar más o menos bien, peor o mejor, pero este equipo siempre va al ataque, siempre, en casa y fuera".

Arbeloa, como todos los componentes de la plantilla madridista que han elogiado, no solo el fichaje sino el cuadro técnico, el método y las ideas futbolísticas de Mourinho, pidió "un poco de tiempo" para que el nuevo responsable del Madrid pueda implantar sus ideas en la plantilla y su estilo de juego vaya tomando cuerpo en el campo. "Mourinho intenta adaptar los jugadores que tiene a su estilo de juego y, sobre todo, trata de averiguar cuál es la mejor posición de cada uno de nosotros para fortalecer su fútbol. Empieza a saber muy bien qué es lo que puede sacar de cada uno de nosotros". Arbeloa recordó ayer que "el Madrid tiene, en estos momentos, varios jugadores muy polivalentes en el centro del campo y en su delantera y el mister intenta saber dónde rendirá mejor cada uno de ellos. Eso lleva su tiempo".

Piqué señaló, el pasado jueves, que intuía una Liga "divertida" y Arbeloa le respondió: "Si la ganamos, en efecto será muy divertida; si la perdemos, no tanto".