Miles de argentinos salieron ayer al centro de Buenos Aires para festejar la victoria. Como en anteriores ocasiones, una multitud se concentró en torno del tradicional Obelisco de la capital argentina donde volvió a inflarse un muñeco con la figura de Diego Maradona y entonarse cánticos festivos en medio del flamear de banderas.

Los festejos argentinos fueron compartidos con hinchas mexicanos y turistas sin que hubiera ningún incidente.

Varios hinchas argentinos consultados por Efe coincidieron en que Argentina jugó ante México el más flojo de los partidos que disputados hasta ahora en el Mundial y en que ahora le espera Alemania, un rival "de terror" en los cuartos de finales del torneo.

De todos modos, esperan que el próximo choque permitirá que Argentina se tome "revancha" de la eliminación a manos del equipo alemán en la tanda de penaltis tras empatar a uno en cuartos del último Mundial.

"Estoy muy contento, pero Argentina tendrá que mejorar mucho para ganarle a los alemanes", apuntó al respecto Alberto Arébalos, mientras que su amigo Pablo Chirico se lamentó de que el equipo de Maradona no haya "apretado el acelerador" luego de marcar el tercer gol, "que había dejado nocaut a los mexicanos". "Aunque Argentina es el único equipo que hasta ahora ha ganado todos los partidos que disputó, todavía queda la duda de cómo va a responder ante un equipo grande", comentó a su vez Gabriel González.

"Una ilusión que crece: Argentina llegó a cuartos por el oportunismo de sus delanteros" luego de "abrir el camino" con un gol anotado en fuera de juego por Carlos Tévez, comentó la web del diario bonaerense La Nación .

Mientras tanto, el periódico Clarín sostuvo a su vez que Argentina fue "contundente y letal" al aprovechar primero un error del árbitro y luego un error "grosero" de la defensa mexicana.