Animado porque ve que varios jugadores magullados han mejorado físicamente e impulsado por su victoria de la pasada semana ante el Prat, el Cáceres Patrimonio de la Humanidad se mide esta noche (20.30 horas) al Cocinas.com en Logroño.

Es un buen momento para los verdinegros, que se han estabilizado en la zona media de la clasificación gracias al buen periodo diciembre-enero que están completando. A apenas un par de victorias de sellar la permanencia, el horizonte se intuye halagüeño. Lo que antes podía considerarse motivo de controversia --por ejemplo, que Ben Mockford solo jugase nueve minutos el viernes pasado o que no se fiche un sustituto para Mansour Kasse-- ahora se digiere con normalidad. No hay nada como ganar, ¿verdad?

En este contexto aparece el viaje a La Rioja ante un conjunto que, en teoría, tenía que estar mucho más arriba que se penúltimo puesto con solo cinco victorias, cuatro menos que el Cáceres. En el Multiusos, en la primera vuelta, se le escapó un triunfo que bien puede ser sintomático de su temporada: a falta de 40 segundos ganaba por ocho puntos y acabó cediendo en la prórroga. "Es un equipo cuya situación es paradójica. No sería raro que llevase tres partidos ganados más, pero no han acertado en las decisiones del minuto final varias veces", analizó ayer Ñete Bohigas. El lenguaje corporal relajado del entrenador era la prolongación del de sus jugadores antes de subirse al autobús camino al norte.

PUNTOS CLAVE Es una relajación en positivo, sabiendo que una derrota no supondrá una tragedia a la vista de cómo está la clasificación. Esa tranquilidad puede ser un arma frente a un rival con muchas más urgencias, aunque con el buen aval de ganar el pasado sábado en una pista exigente como la del Unión Financiera Oviedo.

"Es que es un equipo muy dinámico ante el que vamos a tener que estar muy despiertos, con mucha actividad. Está claro que ha notado anímicamente perder tantos partidos, pero ahora tienen más confianza. Me sigue gustando mucho cómo juega", añadió Bohigas.

Entre los jugadores destacados que mencionó del Cocinas.com está Alejandro Reyes, el hijo de Miguel Angel Reyes, que fue su compañero en el San Antonio y después su pupilo en el Cáceres CB en los primeros años en la Liga ACB. "Es un chico que lo está haciendo muy bien y que pronto puede ser uno de los grandes treses de la liga", indicó. También elogió a Carles Bravo, Borja Arévalo, Alberto Ruiz de Galarreta y Alfredo Ott.

Jugar con los nervios del oponente, por mucha veteranía que tenga aparentemente. Esa parece una de las etapas de la hoja de ruta cacereña hacia el décimo triunfo, lo que supondría superar el 50% actual e incrustarse en mejor disposición en la zona de playoff de ascenso.

El infierno de las seis derrotas consecutivas parece cosa de otra temporada... cuando sucedió apenas hace dos meses. "Nos pasaron muchas complejas en poco tiempo. Estamos con cierta tranquilidad, pero esto todavía puede dar muchas vueltas", dijo el técnico del Cáceres. Atribuyó el mal momento de Ben Mockford a un problema anímico ("sabíamos lo que fichábamos y debemos intentar recuperarle para que nos ayude"). Quizás sea el mismo camino que ya está completando Tautvydas Slezas, que vuelve a ser importante tras unas semanas de bajón. Para asaltar Logroño se necesitará a todos.