El Tour disfrutó en Pau del segundo día de descanso bajo el recuerdo de la hazaña de Lance Armstrong en Luz Ardiden que le puede servir para ganar su quinto título, aunque su ventaja de 1:07 sobre el alemán Jan Ullrich retiene el interés hasta la contrarreloj del sábado, de 49 km.

El Tour del centenario no está sentenciado después de 15 etapas y superadas las principales etapas de montaña en Alpes y Pirineos, algo que resulta noticioso en la era Armstrong, acostumbrado a sentenciar la carrera con antelación. El estadounidense solo ha dictado unan lección majestuosa, en Luz Ardiden después de superar una caída, pero no definitiva.

DEBATE

El pronóstico apunta al ciclista texano, pero el precedente de la contrarreloj de Saint Dizier de 48,5 kms, con la misma distancia que la del próximo sábado, y en la que Ullrich revolucionó el Tour con una concluyente victoria con 1:36 minutos sobre Armstrong, ha abierto el debate. "El Tour aún no ha terminado", coinciden ambos protagonistas. El estadounidense asegura que ha mejorado su forma y ha sido el último en golpear. Espera sentenciar y meterse de lleno en el club de los 5 Tours junto a Jacques Anquetil, Eddy Merckx, Bernard Hinault y Miguel Indurain.

El alemán aceptó la superioridad de su rival en Luz Ardiden y anunció que "quedan esperanzas en la última contrarreloj", donde intentará hacer valer su doble título mundial de la especialidad.