El partido llega para Osasuna en un momento donde el líder tiene que lamerse las heridas que le dejó la derrota en Santa Cruz de Tenerife hace dos viernes. De hecho, desde entonces, apenas se ha hablado de otra cosa en las instalaciones de El Tajonar. Ni siquiera del Extremadura, ya que los rojillos dan por hecho que en su feudo no importa el rival, sino el propio Osasuna y su nivel para seguir sacando triunfos.

Arrasate cuanta con toda su artillería ofensiva para doblegar al Extremadura. La mejor noticia para los de Pamplona es la vuelta de Juan Villar tras dos semanas lesionados. Es el máximo goleador del equipo y podría iniciar el partido desde el banquillo por si Arrasate necesita utilizarlo. También recupera Arrasate en el centro del campo a Oier Sanjurjo, su ancla en la medular. Ha reconocido el técnico de los rojillos que lo echó de menos «cada minuto» de la remontada del Tenerife ante su equipo hace once días.

Tiene muchas posibilidades para elegir su once el técnico del Osasuna, aunque en principio no tocará mucho en defensa. Sí en la portería, donde ha confirmado que jugará con Rubén, portero que había pasado a la suplencia tras la recuperación definitiva de Sergio Herrera. Sin embargo, el trastazo de Tenerife puede obligarle a cambiar.

«Hay que ponerse en modo Sadar, que es lo que estamos siendo, un equipo valiente, vertical, y al que la afición le da alas. Ayer se agotaron las entradas. Es como una cuenta atrás y tenemos que quitar otra hoja del calendario. A ver si entre todos se puede vivir el domingo otro día de comunión», ha dicho Arrasate en la previa del partido, sabiendo que El Sadar será clave en sus aspiraciones de ascenso.

En el partido de la primera vuelta, el Osasuna ganó con remontada por 2-3.