ARROYO - 0: Juanma; Manu, Bayón, Castaño, Santi Polo; Juanjo (Dani González, minuto 71), Abel Buades, Juanma Morán, Ruano, Willy (Espinar, min.63) y Juanfran.

ALGECIRAS - 0: Romero; Máiquez, Víctor González, Carlos Fernández (Javi Fernández, min. 92), Merino; Melchor (Iván, min.72), Berlanga (Mario, min.45), Parada, Alfaro, Carlitos Andújar y Ryan Harper.

ARBITRO: Gálvez Rascón (Madrileño). Amarillas a los locales Juanfran y Abel Buades y a los algecireños Merino y Víctor.

INCIDENCIAS: Homenaje al exárbitro Andrés Ceballos Silva, recientemente retirado.

Arroyo y Algeciras brindaron anoche un partido igualado, emocionante y con alternativas pero que se acabó saldando con empate a cero por la falta de puntería de los futbolistas de ambos equipos. Fueron los andaluces de Manolo Sanlúcar los que mayor posesión dispusieron, sobre todo en la primera mitad, pero acabaron lamentando la falta de efectividad en los momentos determinantes.

Los extremeños, por su parte, disfrutaron de más y mejores oportunidades para haber desnivelado la balanza, aunque tampoco estuvieron finos en la finalización. Al final, justas tablas entre extremeños y algecireños.

Salió mejor plantado el conjunto de Manolo Sanlúcar y poco tardó en generar la primera ocasión en la portería arroyana. Pase en profundo de Alfaro al que Melchor no llegó por escasos centímetros en una ocasión manifiesta. El primer acercamiento de los locales no llegó hasta el minuto diez. Servicio de esquina de Ruano y Bayón que remató desviado por muy poco. Toma y daca en ambas áreas en estos primeros compases.

La presencia sobre el terreno de juego era de los del Campo de Gibraltar, aunque los acercaminetos peligrosos correspondían a los ajedrezados. Reclamó Abel Buades un posible penalti en el minuto 17 en un forcejeo dentro del área pequeña. El colegiado no vio nada punible y dejó seguir el juego.

Instantes después llegaría la ocasión más clara de los rojiblancos. El exarroyano Alfaro se planta ante el portero Juanma, pero éste le adivina el pensamiento y despeja el lanzamiento del extremo rojiblanco. Desperdiciaba un mano a mano el Algeciras y a punto estuvo de lamentarlos, puesto que el tramo final de la primera mitad fue para los de Juan Marrero. Willy, primero, y Ruano, poco después, rondaron el 1-0 para los de Arroyo de la Luz, aunque sus disparos no fueron del todo atinados.

Bajó algo la intensidad del juego en los últimos minutos y el marcador permaneció inamovible hasta el descanso. Todo estaba por decidir en un duelo claramente táctico y con mucho respeto por ambos lados.

SEGUNDA PARTE Empezó más enchufado el once del Arroyo tras el asueto y cerca estuvo de adelantarse a los pocos minutos de reanudarse el juego. Ruano saca un córner desde la banda derecha, Abel Buades conecta un lanzamiento y obliga a la defensa algecireña a despejar bajo el travesaño. Instantes después, y de nuevo a balón parado, fue Willy el que obligó al guardameta de los andaluces a intervenir para salvar el 1-0.

Parecía que los extremeños asediaban, sobre todo desde la pizarra, pero el Algeciras repelió esta presión con una oportunidad que casi se transforma el gol. Indecisión de la retaguardia ajedrezada, Carlos Andújar gana metros, pero su chut no encontró finalmente portería.

Llegaron los mejores minutos de los de Manolo Sanlúcar, que poco después rondaron el gol con una acción de Mario. El centrocampista estuvo a punto de sorprender al ejecutar una falta lateral de forma directa. Juanma, muy atento, mostró sus reflejos y envió el cuero fuera de sus inmediaciones.

A partir de ese momento el capitán local Abel Buades tomó las riendas del juego y el Arroyo disfrutó de sus minutos más intensos, aunque les faltó paciencia en el último pase a los de Juan Marrero para sorprender a la bien organizada algecireña.

La última ocasión clara del partido llegó en el minuto 75 y tuvo color rojiblanco. fue Contragolpe bien comandado del Algeciras y el escocés Ryan Harper ensayó un centro-chut que casi sorprende al meta Juanma. Y poco más. En los últimos minutos se firmaron tablas con dos equipos que parecieron conformarse con el empate. El Arroyo sumó, pero no tanto como quería.