La asamblea general de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), reunida ayer en la sede de la RFEF en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, acordó ayer cambiar, con 91 votos a favor, 5 en contra y 2 abstenciones, el sistema de ascenso a Segunda División para la próxima temporada, que pasa de un sistema de liguilla a otro de eliminatorias directas.

La fase de ascenso a Segunda División la disputarán los cuatro primeros equipos clasificados en sus respectivos grupos de Segunda División B (grupo I, II, III y IV, éste último con cinco equipos extremeños en liza), que se dividirán en cuatro grupos, en los que no podrán coincidir clubes que hayan coincido en la Liga.

En cada grupo habrá un campeón, un equipo clasificado en segunda posición, otro en tercera y otro en cuarta durante la Liga y se enfrentarán entre ellos un primero contra un cuarto y un segundo contra un tercero, disputándose el primer encuentro en el campo del cuarto y tercer clasificado.

Los dos vencedores de cada eliminatoria se enfrentarán entre ellos, nuevamente a doble partido, siendo el partido de ida en el campo del equipo que acabó la Liga peor clasificado.

De esas eliminatorias saldrán los cuatro campeones que ascenderán a Segunda División. En el supuesto de que el equipo que lograse su ascenso no pudiera hacerlo, la plaza sería para el equipo que hubiera perdido la eliminatoria contra ese club.

Este sistema ya se utilizó la última temporada en los ascensos de Tercera División a Segunda División B, con buen resultado para los extremeños (ascendieron Díter Zafra y Don Benito).

VILLAR, HASTA EL FINAL Mientras tanto, Angel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), no está dispuesto a rendirse ante las críticas y la presión de causas judiciales abiertas contra algunos de sus directivos y anunció hoy que se presentará a las elecciones que se celebrarán después del verano.

Villar, que accedió al cargo en 1998, hace 16 años, está decidido a afrontar un quinto mandato. Hasta ahora, había dejado entrever que tenía la intención de hacerlo, pero no lo había anunciado oficialmente.

"Pienso presentarme a esas elecciones. La confianza que siempre me ha demostrado del fútbol español, espero ejercerla ahora nuevamente para poder aspirar a la reelección", manifestó Villar, visiblemente emocionado, ante los asistentes a la asamblea general ordinaria.

"Me consta que cuento con el apoyo de la gran mayoría del fútbol español", subrayó el presidente de la RFEF, y aseguró que presentará "un proyecto ilusionante" porque se siente con fuerzas y mantiene "la misma ilusión de siempre".

Villar insistió de nuevo en que existe una "trama organizada" para acabar con él y con su equipo, pero aseguró que va a hacer frente a todos los que quieren desprestigiarle.

"Contra una minoría que habla del caos que reina entre nosotros, los datos son contundentes. Toda la organización federativa ha funcionado a plena satisfacción", afirmó el dirigente.

Villar destacó durante su discurso que no puede negar el hecho de que "hay denuncias" y procesos abiertos contra dirigentes de la Federación, pero reiteró sus quejas contra la "cadena de vejaciones, calumnias y falsedades que se han transmitido y se vierten regularmente contra la RFEF, directivos y familias".