El dueño del Astana es Manolo Saiz, porque fue él quien consiguió el patrocinio del Gobierno de Kazajistán hasta finales del 2008, pero no está en la Vuelta, donde tampoco se le espera. El trabajo de despacho ha servido para que la Unión Ciclista Internacional no le retirara la licencia. El futuro del equipo es todo un lío. Saiz tuvo que renunciar a la dirección deportiva, pero sigue siendo el máximo accionista y se ha asegurado la contratación de Andras Kloden.