El fútbol llegó a Bilbao a través del mar. Lo trajeron trabajadores ingleses y universitarios bilbainos. Con ellos vino el primer balón, el primer par de botas y, por supuesto, el nombre del club. Hace 105 años empezó la historia deportiva de este emblemático club, jugando los primeros partidos en la llamada campa de los ingleses . El final de la tercera guerra carlista aceleró el crecimiento económico de Bilbao. La venta de mineral e hierro a la Gran Bretaña permitió el progreso, pasando Bilbao de tener 9000 habitantes en 1787 a 83.000 en 1898.

El sueldo que ganaba su estrella, Pichichi, nieto de Unamuno, en el Athletic se lo gastaba en juergas con los compañeros después de los partidos. Cuentan de este jugador que, en una ocasión con motivo de una concentración de la selección en el hotel donde estaban hospedados, Pichichi se evadió para acostarse con una camarera. El seleccionador le pidió explicaciones y Pichichi contestó: "míster, después del partido hablamos". La conversación no llegó a producirse, puesto que Pichichi marcó un gran gol, ganando el encuentro.

Pichichi ganó cuatro Copas, siendo el goleador por excelencia de aquella época, y autor del primer gol marcado en San Mamés, llevando todavía su nombre el máximo goleador.

REFERENTE ZARRA

Otro referente en el Athletic es Telmo Zarra, que está a punto de cumplir 97 años. Todavía se recuerda en Bilbao la goleada que el Athletic endosó al Barcelona en la liga española de 1931, 12-1 con Iriondo, Venancio, Zarra, Panizo y Gainza.

Zarra, heredero de Pichichi, no en vano fue máximo goleador de liga en seis ocasiones marca aún no igualada, conserva además el récord de 38 goles. Iriondo tenía mucha velocidad, Venancio era muy trabajador y poseía una pegada impresionante de balón. Zarra era todo pundonor y goleador nato, luchaba siempre. Le daba igual recibir muchos golpes. Panizo gozaba de una técnica exquisita. Gainza, hábil, zorro y rápido.

La historia del Athletic es muy amplia y recoge anécdotas como la del cura de Guernika. El cielo era un lugar donde estaban jugando siempre el Athletic y el Madrid y siempre ganaba el Athletic.

El Athletic es el tercer club con más de 300 peñas. La afición rojiblanca está también presente en otros continentes, como demuestra que exista un club en Guinea llamado Athletic. También en Extremadura existe ese amor a los colores bilbaínos, habiendo esculpido un cantero el escudo del Athletic en un monumento histórico de Trujillo, frente a la estatura de Pizarro.