Enrique Cerezo, presidente del Atlético de Madrid, pedirá a la AFA (Asociación del Fútbol Argentino) que se haga cargo de las consecuencias económicas derivadas de la grave lesión de Maxi Rodríguez, lesionado ayer en el amistoso España- Argentina, y que le tendrá apartado seis meses de los terrenos de juego.

Cerezo dijo que "el Atlético de Madrid siempre ha cedido, cede y cederá sin problemas a sus internacionales a las Federaciones nacionales para jugar partidos oficiales, pero el asunto de los amistosos debe ser regulado cuanto antes por la Fifa".

Para Cerezo los partidos internacionales de selección deben jugarse en el mes de mayo, una vez acabados los torneos nacionales. El presidente de Atlético de Madrid se mostró indignado con lesión de Maxi, ocurrida en un campo con un césped en precarias condiciones, y espera que la Federación argentina responda pronto.

JUSTIFICACION "Es lógico que la AFA se responsabilice económicamente de la baja de Maxi, un futbolista al que nosotros nos cuesta mucho dinero al año y que era hasta hoy un futbolista referente para el equipo. Su ausencia en el Atlético de Madrid es muy importante", apuntó Enrique Cerezo. Argentina tiene firmados una serie de encuentros amistosos por Europa organizados por una empresa de capital ruso. Y el Atlético de Madrid entiende que la AFA seguro que tiene un seguro que asuma la responsabilidad de la lesión de Maxi.

Hasta el momento, la AFA no se ha puesto en contacto con el Atlético de Madrid. Javier Aguierre, técnico del Atlético de Madrid, confesó en conferencia de prensa que Maxi le había dicho que ni Luis Aragonés ni Alfio Basile querían jugar el partido por ver la irregularidad del césped, recién plantado en la inauguración de la Nueva Condomina.

CONFESION Aguirre declaró que Maxi Rodríguez le confesó que ni Luis Aragonés ni Coco Basile querían jugar el partido del miércoles por el mal estado del césped. "Se levantaba mucho la hierba, mucha tierra. El propio Maxi me confesaba que tanto Luis (Aragonés) como el Coco (Basile) querían no jugar ese partido. Aparentemente, el día anterior ni habían entrenado ahí por cómo estaba el campo. Nos tocó a nosotros, le tocó al pobre Maxi", advirtió. "Hay que poner buena cara. Maxi está animado, está pensando que le viene la parte más complicada, pero es así el fútbol. Cuando menos te lo esperas te salta la liebre por cualquier parte", añadió el técnico, que calificó la lesión como una "desgracia".