Si el Liverpool fundamenta la mayor parte sus esperanzas de eliminar al Atlético en que Anfield Road sea una caldera insoportable para el Atlético, el problema es de rango menor para el equipo rojiblanco, según su entrenador, Quique Sánchez Flores, convencido de que los jugadores que dirige están en condiciones idóneas para acceder a una final europea al cabo de 24 años. Falta que los futbolistas le den la razón esta noche en el legendario estadio de los reds (Tele 5, 21.05 horas).

El técnico atlético se remite a lo sucedido hace una semana en el Vicente Calderón, que acabó con un triunfo corto para sus méritos (1-0) pero con la convicción en el conjunto madrileño de que el último paso hacia la final de Hamburgo del próximo 12 de mayo es algo más que una posibilidad. "Tenemos que repetir muchas cosas de las que hicimos bien y asegurar alguna más. No me imagino salir a esperar a ver qué hace el Liverpool. Entre nuestros planes está hacer un gol que facilite más las cosas", dijo ayer Quique.

Sánchez Flores confía en el poder intimidatorio de Agüero, que se perdió la ida por sanción y que tiene ante sí una nueva oportunidad de demostrar su extraordinaria categoría en un escenario imponente.

Huérfano de Torres, el Liverpool tendrá que mejorar mucho sus prestaciones para volver a una final europea y camuflar así sus dificultades en Inglaterra y las de Rafa Benítez, de quien se dice que su futuro pasa por la Juventus la temporada que viene. Hasta hoy no decidirá si coloca a Kuyt o Ngog como referencia atacante.