ATHLETIC: Iraizoz; De Marcos, Bóveda, Etxeita (Iturraspe, m.65), Balenziaga; De Marcos, Beñat; Susaeta (Lekue, m.72), Raúl García, Muniain (Williams, m.59); y Viguera.

ATLETICO: Oblak; Juanfran, Savic, Godín (Lucas Hernández, m.11), Filipe Luis; Thomas (Carrasco, m.61), Augusto, Koke, Saúl; Griezmann y Fernando Torres.

GOL: 0-1, m.38: Fernando Torres.

ARBITRO: Martínez Munuera (Valenciano).

Una nueva conexión entre Antoine Griezmann y Fernando Torres mantuvo al Atlético de Madrid empatado a puntos con el líder, Barcelona, y con sus opciones intactas en la pelea por el título al imponerse al Athletic en San Mamés por 0-1.

La lesión muscular de Godín que provocó su pronta sustitución, en el minuto 11, y un balón que recogió Iraizoz muy ajustado en la línea del área grande, fue lo más relevante de un arranque con tres llegadas locales. Pero ni Muniain, ni Viguera ni Beñat, este a balón parado, llegaron ni a inquietar a Oblak.

Intentaron responder unos minutos los visitantes, pero Griezmann le quitó el balón a Saúl, que llegaba de cara en buena posición para disparar a portería, y a Augusto se le marchó alto un disparo desde la frontal sin tampoco mayor peligro.

Cuando parecía que llegaba el descanso en medio de la nada, o del orden táctico y las precauciones de ambos equipos, una conexión entre Griezmann y Torres abrió el marcador. El francés puso un centro perfecto y el madrileño un espléndido testarazo que resultó letal para Iraizoz.

No se habían recuperado del palo recibido el Athletic y un San Mamés muy enfadado con el árbitro cuando Thomas, en una jugada polémica con Iraizoz en el suelo tras chocar en un despeje contra uno de sus defensas, mandó al palo un remate con toda la portería para él.

Esa acción, en la que queda la duda de si el ghanés vio a Iraizoz caído, y también la de si debía o no echar fuera un balón sin que el colegiado hubiese parado el partido, encrespó al público.

Intentó apretar el Athletic al inicio de la segunda mitad y Beñat y Raúl García intentaron buscar las cosquillas a Oblak.

Frenó de nuevo al Atlético a los locales y Griezmann casi saca petróleo en una jugada en solitario en la que enfiló sin ayuda hacia Iraizoz y se le interpuso Bóveda para arrebatarle el balón.

Lo pasaron mal los de Simeone en un arreón bilbaíno con tres córneres seguidos en el minuto 75. Con el Athletic volcado en busca del empate, Iraizoz salvó a su equipo del 0-2 con un enorme paradón, abajo junto al palo, a disparo de Carrasco tras bajar el balón con el pecho después de un contraataque. Y Carrasco volvió a perdonar el 0-2 en el minuto 93 disparando alto desde el punto de penalti tras dejar a varios rivales por el suelo.

En los minutos anteriores, no obstante, el Atlético padeció lo suyo con continuos centros hacia el área en los que Raúl García estuvo amenazador.