Durante los últimos fines de semana, el atletismo extremeño ha estado presente en varios acontecimientos de relieve, tanto a nivel de base como de élite. Los resultados no han sido, ni mucho menos, espectaculares, pero las lecturas no pueden ser, ni mucho menos, negativas. Que Javi Alves o Sonia Bejarano no se metan en las respectivas finales del Europeo de pista cubierta no debe enmascarar el éxito que supone estar presente en una cita continental de primer orden. Y es que nuestro atletismo, me recordaban hace unos días, sigue siendo estadísticamente el deporte que más satisfacciones da a la comunidad. Las cifras están ahí: números en mano, es el que más internacionales proporciona con mucha diferencia. Y en la nómina hay excelentes atletas: Villalobos, Alves, Bejarano, Jordán, Cienfuegos... por citar a algunos. ¿Esto qué quiere decir? Muy simple: amén de la calidad y esfuerzo de los deportistas, se sigue trabajando bien, muy bien, en una federación seria y con fe. Y eso no lo pueden decir todas, ni mucho menos.