Lionel Messi, jugador del Barcelona, reconoció ayer sentirse "muy contento" tras su buena actuación en el partido de Liga de Campeones ante el Werder Bremen y se mostró ansioso porque se resuelva su situación burocrática y pueda volver a jugar en la Liga española.

"De momento lo llevo bastante bien, pero espero que se arregle todo", expresó el argentino después de participar junto al resto de suplentes en un entrenamiento con el Barcelona B en el Mini Estadi.

Messi reconoció que entró al terreno de juego durante el partido ante el Werder "con muchas ganas, como siempre" y que recogió las felicitaciones de "los compañeros y el técnico".

Halagado por la mayoría de los analistas y comparado con Maradona y Cruyff por su propio presidente, Joan Laporta, Messi admitió que "es lindo que te elogien, pero aún me queda mucho trabajo por hacer".

Mientras tanto, el Barcelona inició su andadura europea derrotando al Werder Bremen (0-2) en un partido en el que ofreció su cara más pragmática, manteniendo su puerta a cero por tercer partido consecutivo y apostando por un juego menos virtuoso pero más efectivo.

El equipo parece haber renunciado a una cuota de estética para ganar en fiabilidad. Consciente de que la alta competición exige una mezcla equilibrada entre espectáculo y solidez, no se dedica a desplegar todas sus florituras, pero gana sus partidos.