UNIVERSIDAD LPGC - 2: Vargas, Soto, Casquero (Futre, min. 57), Ferreres, Alberto Hernández, Sergio Hernández, Omar (Cristo Marrero, min. 63), Eloy (Cristo Martin, min. 45), Aridane, Angel Sánchez, David Feito.

BADAJOZ - 0: Pagola, Grille (Gori, min. 85), Aloisio, Jaraíz, Ruby, Tete, Cajoto, Ortiz, Parada (Marcos, min. 84), Solano, Amine.

GOLES: 1-0: min. 84, Alberto Sánchez, de penalti. 2-0: min. 86, Aridane.

ARBITRO: Corral García (Colegio gallego). Amonestó a Alberto Hernández, Sergio Hernández y Soto por el Universidad; y a Amine, Rubi y David por el Badajoz.

El Badajoz se ahoga en sus propios errores. Ayer recibió una nueva derrota, la quinta consecutiva, cuando el Universidad de Las Palmas (2-0) se aprovechó de su inoperancia en los últimos minutos para quedarse con los tres puntos y mantenerse en la zona alta de la tabla.

El Badajoz era quien más presión sentía al inicio del partido, pues las últimas cuatro derrotas hacían mella en los hombres de Adolfo Muñoz, obligados a sumar los puntos para calmar los ánimos de su afición. Pero no eran los únicos nerviosos. También lo estaban los locales, que querían acabar el año en puestos de play off .

Así, ambos conjuntos saltaron al terreno de juego algo atenazados, aculados en la zona defensiva y sin la claridad necesaria para trenzar jugadas de peligro al área rival. Pero si alguien estuvo más acertado en el primer parcial, ese fue el cuadro pacense, que supo controlar con más claridad la circulación del esférico.

TETE, EL MEJOR Pese al supuesto mejor toque de balón, tan solo Tete pareció realmente interesado en la construcción del juego y no fue hasta el 22 cuando los de Badajoz dispusieron de la primera clara ocasión de gol. La ocasión despertó al cuadro universitario que respondió tres minutos más tarde con una jugada por banda que a punto estuvo de dar frutos.

El Badajoz volvió a ponerse el mono de trabajo y trató de recuperar el control del juego y la tranquilidad en la transición entre defensa y ataque. Tras diez minutos sin peligro en ninguno de los dos arcos, el mejor de los pacenses, Tete, trató de sorprender a Vargas desde la media distancia, pero éste, atento, desbarató la opción de gol con una buena intervención.

Tras el paso por vestuarios, el Universidad salió mejor situado sobre el terreno de juego, pero el Badajoz no renunció a su juego del primer parcial y supo marcar bien el tempo en el centro del campo. Pero si grancanarios y pacenses se medían con la misma fuerza e intensidad, el duelo acabaría cayendo del costado local. Así, empezaron a sucederse ocasiones para los de casa, que incrementaron la presión.

La entrada de Futre dio aire fresco a los locales, que empezaron a triangular con peligro y a sacar provecho del juego por banda. Fue en los minutos finales cuando la maquinaria pacense empezó a flaquear y las ansias locales se tradujeron en un asedio a la portería de Pagola. El primero llegó tras un penalti por manos de Grille (m.84). Fue la sentencia para el Badajoz, que se confirmó dos minutos después cuando Aridane hizo el segundo tras un espectacular patadón.