Aparte de expresar los previsibles deseos de victoria en el choque de mañana ante el Sevilla Atlético para ayudar a los demás equipos extremeños de Segunda B y a su propio filial, Julio Cobos, entrenador del Cacereño, habló ayer un poco en clave de balance y otro poco oteando el futuro.

La habitual comparecencia de los viernes tuvo algo de extraño. Se realizó fuera del estadio Príncipe Felipe ya que, pasadas las doce de la mañana, sus oficinas estaban ya cerradas. El club parece haber entrado en una inercia de pesimismo, entre sus perennes problemas financieros y los ocho partidos consecutivos sin ganar del equipo.

A Cobos se le preguntó si, mirando hacia atrás, cambiaría algo de sus decisiones de los últimos meses. "Es imposible. No suelo pensar en lo que he hecho o no he hecho. Eso sirve de bien poco. Estoy contento con la plantilla y el trabajo que ha estado haciendo. Al final una temporada te pone en tu sitio. Es cierto que durante un tiempo hemos estado cerca de entrar en la fase de ascenso, pero también lo es que nunca nos hemos colocado entre los cuatro primeros", respondió.

Dispuesto a seguir

De momento, fue reticente a ponerse nota y hacerse una evalución en su primer año como primer entrenador profesional. "Vamos a ver cómo quedan estos dos partidos. Creo que la plantilla se ha entregado a muerte y ha estado comprometida. Hemos tenido una muy buena Copa del Rey y en la liga hemos estado para engancharnos, pero nos han faltado cosas", indicó, reconociendo que "quizás la temporada se nos está haciendo un poquito larga".

Otra cuestión obligada es si está dispuesto a renovar contrato. "Quiero seguir entrenando y el Cacereño sería una muy buena opción, pero es algo que no depende de mí", apuntó. Todo parece indicar que no ha habido acercamientos entre él y los propietarios de la entidad en ese sentido.

Precisamente, y respecto a Antonio Martínez Doblas y la continuidad del club, dijo que el consejero delegado "imagino que tiene que echar números para saber hasta dónde puede llegar. La situación del país y del fútbol es complicada".

Una idea que repitió bastante fue que el equipo está donde le corresponde en la clasificación: "Con un poquito más de suerte hubiésemos estado algo más arriba, pero el final de las temporadas te sitúa donde te mereces, tras 38 partidos. Estás donde tienes que estar".

Según aseguró, no ha hablado directamente con los técnicos de Arroyo, Juan Marrero, y Villanovense, José Luis Montes, que fue su entrenador jefe hace dos temporadas en el club verde. "Tampoco hace falta que me llamen. Ellos saben que nosotros vamos a intentar ganar nuestro partido por todos los medios. Pero eso también pasa por ellos. Si yo fuese el entrenador de Villanovense y Arroyo intentaría preparar lo mejor posible mi partido y luego mirar de reojo a ver si nosotros le echamos una mano", declaró Cobos.

Juli Ferrer y Gaspar

Según contó, para mañana han aumentado las esperanzas de que puedan estar los dos jugadores tocados , el defensa Juli Ferrer y el mediapunta José Gaspar. "Estamos entrenando con mucho cuidado", confesó. Los lesionados Raúl Medina, Gonzalo y Palero y el sancionado Valverde no estarán.