Severiano Ballesteros recibió ayer el alta hospitalaria tras 65 días ingresado y señaló en un mensaje publicado en su página web que continuará "luchando con paciencia y determinación" contra el tumor que se le detectó y que gracias a los médicos podrá jugar "el mulligan (segunda oportunidad en lenguaje golfístico) de mi vida".

"Gracias a la eficacia y humanidad de los neurocirujanos, excelentes profesionales y únicos como personas, podré jugar el mulligan de mi vida, que espero y deseo disfrutar al máximo", destacó Ballesteros, que ha permanecido durante 66 días en el Hospital La Paz de Madrid.

"Aunque me queda mucho tiempo por recuperarme y continuaré luchando con paciencia y determinación contra el tumor que me fue detectado", subrayó el golfista, que destacó la labor de los doctores Heredero, Isla y López Pérez, "que me han concedido un tiempo de vacaciones con carácter temporal", añade Ballesteros, que calificó como de "familia" todos aquellos que han contribuido a sus cuidados. Ballesteros aprovechó para enviar un mensaje de ánimo a los que padecen una enfermedad similar: "Cuando se lucha con fe y perseverancia, podemos salvar cuantos obstáculos encontremos en nuestras vidas. Nuestra mente es muy fuerte, más de lo que podemos imaginar".