Ayer fue un largo día de comunicados, pero sigue sin saberse la fecha definitiva que acogerá el Barça-Madrid que debía disputarse el próximo 26 de octubre en el Camp Nou. El Comité de Competición de la Federación Española de fútbol (FEF) ordenó, tras intensas horas de reunión, «desestimar» la solicitud de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) de invertir el orden de los encuentros para jugar primero el clásico en el Bernabéu, al tiempo que «acordaba el aplazamiento por concurrir causas excepcionales, de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 240» del reglamento federativo. La LFP instó a los dos clubs a «ponerse de acuerdo en una nueva fecha antes del próximo lunes 21 octubre a las 10.00 horas».

Barça y Madrid fueron diligentes y eligieron la misma fecha: miércoles 18 de diciembre, en lo que sería el penúltimo encuentro del año 2019. No hicieron esperar al Comité hasta ese plazo. Apenas un par de horas más tarde de que emitiera el órgano disciplinario su dictamen, el Barça lanzaba un comunicado en el que expresaba su negativa a jugar primero en el Bernabéu, recordando que su deseo «era jugar el 26 de octubre, tal como estaba previsto», recalcando «una confianza absoluta en la actitud cívica y pacífica de su masa social, que siempre se expresa en el Camp Nou de manera ejemplar». Y de manera inmediata elegía el 18 de diciembre. Una hora más tarde, el Madrid, a través de sus canales oficiales, coincidía en la misma solución aunque de forma mucho más breve, incluyendo el deseo azulgrana. «El Real Madrid comunica que la fecha propuesta por ambos clubs es la del 18 de diciembre».

COINCIDE CON LA COPA / Pero ese día no complace, sin embargo, a Javier Tebas, presidente de la Liga, quien insiste en que el clásico debe jugarse lo antes posible y exige que se dispute el miércoles 4 de diciembre, al tiempo que recuerda que tiene la competencia para elegir los horarios y días, al margen de lo que opinen ambos clubs. No solo eso. La LFP considera que tiene el mandato para maximizar los ingresos obtenidos por la comercialización de los derechos audiovisuales de Primera y Segunda División además de recordar que el 18 de diciembre, fecha pactada por Barça y Madrid, coincide con la eliminatoria de la Copa del Rey, que quedaría muy devaluada ante el impacto del clásico. La solución definitiva tendrá que esperar hasta la semana próxima.