Una buena posibilidad es la que tiene hoy el Barça frente al Almería para situarse líder en solitario del campeonato, después de dos partidos consecutivos como visitante y de contar sus partidos ligueros como triunfos. Necesita el equipo de Guardiola una victoria y esperar a ver qué ocurre en el duelo entre el Sevilla y el Real Madrid.

El buen fútbol es el argumento de la exquisitez del Barça. Más de tres goles por partido y una buena reacción ante diferentes perfiles de rival, el último un correoso Málaga, un equipo que puso en aprietos a los azulgrana, en un partido marcado por la violencia del central Weligton con Leo Messi y Gerard Piqué.

Continuará Guardiola sin contar con los lesionados Chygrynskiy y Henry y podría recuperar a Bojan Krkic, quien se lesionó durante el primer partido de Liga -una rotura en el aductor medio del muslo izquierdo- y ha sido baja desde entonces.

El partido reúne unos cuantos alicientes como la conmemoración de los diez años desde que Carles Puyol debutó en el primer equipo y el retorno ahora como entrenador del Almería de Hugo Sánchez, uno de los delanteros más odiados de los barcelonistas.

Guardiola podría darle unos minutos a Rafael Márquez, quien apenas ha contado con 48 minutos en los dos partidos ligueros que ha disputado. El mexicano se lesionó durante la pretemporada norteamericana.

En defensa, Maxwell tiene opciones de volver a jugar como lateral izquierdo. Y en la medular, Touré y Busquets se disputan la plaza de mediocentro defensivo, mientras que Keita y Xavi, de los mejores en el arranque liguero, parecen intocables, como Leo Messi y Zlatan Ibrahimovic. La tercera plaza en la delantera, lesionado como está Thierry Henry, debe ser para Iniesta.