Ningún equipo inglés, en general, y menos el Liverpool, en particular. Es el sentir del Barça cara al sorteo de los cuartos de final de la Liga de Campeones que hoy se celebra en la ciudad suiza de Nyón. Los azulgranas quieren evitar a toda costa tener que medirse al Arsenal, líder de la Premier, con ganas de revancha por la derrota en la final de París; al Manchester United, al Chelsea, con la Champions como asignatura pendiente, y sobre todo al Liverpool de Fernando Torres, equipo al que el Barça nunca ha eliminado en Europa y verdugo de los azulgranas el año pasado en octavos.

Los rivales más apetecibles para el conjunto de Rijkaard son tres. Fenerbahçe, Schalke 04 y Roma, por este orden, colman las preferencias de los azulgranas, que además esperan que el sorteo también sea benigno para poder jugar el partido de vuelta en el Camp Nou.

EL REAL MADRID El equipo blanco piensa en el partido que disputará mañana en A Coruña, donde no gana desde hace 17 años. En el Madrid, la obsesión por lograr el título ha provocado tensión. "Parece que para la prensa ganar la Liga no sería un mérito", declaró Baptista. "Queríamos ganar los tres títulos, pero nunca dijimos que fuésemos a hacerlo. La Champions era el que más deseábamos", añadió el brasileño.