La Real Sociedad, plena de moral con su cuarta plaza y de fe en su elogiado estilo, se ve en condiciones de amargar la jornada y los días previos al clásico a un Barcelona que ha sufrido en demasiadas ocasiones cuando visita San Sebastián (16.00 horas).

Hacer que Messi sea un futbolista terrenal será el objetivo de la defensa blanquiazul, ya que el argentino hace mucho daño a los donostiarras, a los que ha marcado 15 goles. La Real debe frenar el potencial ofensivo de los catalanes con una defensa de circunstancias, ya que Elustondo está lesionado y su sustituto, Robin Le Normand será baja por sanción.

«Los puntos ante la Real son los mismos que ante el Madrid», proclamó Valverde cuando intuyó por dónde discurriría su rueda de prensa antes del entrenamiento de ayer. Al final, comprobada la temática predominantemente blanca, optó por bromear: «No gastéis tantas preguntas del clásico porque el martes tenemos que hablar de algo».

Por mucho que avisó de que no se iba a preocupar del Madrid y todas sus repercusiones -básicamente más extradeportivas, que las derivadas del fútbol-, diciendo que anteponía su interés a la cita frente a la Real, ni siquiera convenció a la audiencia admitiendo que el vestuario desconoce el alcance de todas las informaciones que aparecen.

A Valverde le ocupa ahora presentarse al clásico en la misma posición clasificatoria. Y eso pasa por ganar hoy en Anoeta. La Real es cuarta, aunque ha ganado uno de los últimos cinco partidos. La referencia de Valverde será la Real que ya se las hizo pasar canutas la temporada pasada en el Camp Nou. Aunque él como entrenador azulgrana no ha perdido en Anoeta (2-4 y 1-2 en sus visitas), recordó que el Barça sí que pasó muchos años sin ganar allí.

REACCIONAR EN LIGA / Reencontrado con el gol y sus imponentes cualidades el miércoles en un momento límite del Atlético de Madrid, Joao Félix surge como la mejor solución frente a los incesantes empates en la Liga, el marcador más común este curso de su equipo y de Osasuna, enfrentados en el Wanda Metropolitano (21.00 horas). No marcaba desde el 1 de octubre el atacante portugués, que había pasado desde entonces por una lesión, por la inesperada suplencia en dos encuentros nada más recuperarse de esa articulación y por la frustración de las ocasiones falladas.