MALAGA 0: Contreras; Josemi, Fernando Sanz, Roteta, Valcarce; Gerardo, Sandro (Manu, m.72), Miguel Angel (Leko, m.72), Musampa; Dely Valdés (Canabal, m.79) y Darío Silva.

BARCELONA 0: Bonano; Puyol, Gabri, Gerard (Oleguer, m.13), Cocu; Rochemback (Riquelme, m.61), Xavi, Iniesta, Motta; Overmars (Saviola, m.66) y Kluivert.

ARBITRO: Evaristo Puentes Leira (C. Gallego). Amonestó a los locales Josemi, Sandro, Roteta, Gerardo, y al visitante Kluivert.

INCIDENCIAS: Asistió Iñaki Sáez, seleccionador nacional, así como el seleccionador holandés Dick Advocaat.

El Barcelona no pudo conseguir su tercera victoria consecutiva en La Rosaleda, donde firmó unas tablas sin goles ante el Málaga, un resultado que no beneficia a ninguno de los contendientes porque frena la escalada del cuadro de Louis Van Gaal y supone el octavo partido sin ganar de los pupilos de Joaquín Peiró.

El cuadro azulgrana, que tuvo siempre a seis canteranos en el equipo, cuajó una pobre primera mitad, sin apenas llegadas al área rival, y ganó en ambición ofensiva en el segundo periodo con la entrada de los argentinos Javier Saviola y Juan Román Riquelme.

Sin embargo, el Barcelona, que se había aprovechado del ligero bajón de los malaguistas, no supo concretar las opciones que tuvo ante el portero internacional Contreras y al final pasó incluso por algún apuro para empatar.

Los primeros 45 minutos fueron de mayor dominio local ante un Barcelona que en ningún momento arriesgó y que basó su juego en el control del medio del campo, pero no buscó las bandas.

El Barcelona, con una defensa de emergencia, tuvo la mala fortuna añadida de la lesión de Gerard, improvisado central de nuevo, quien no tardó en dejar su sitio al joven canterano Oleguer. No obstante, la doble D malaguista no pudo romper la resistencia de la zaga rival.

EN LA SEGUNDA MITAD

Tras el descanso, la menor presión de los locales y la entrada de Riquelme le dieron al partido un color algo más azulgrana, porque el equipo de Van Gaal tomó el mando y comenzó a llegar con peligro ante Contreras, aunque su fútbol siguió dejando mucho que desear.

Kluivert, Iniesta y Xavi inquietaron al portero malaguista, pero el Barcelona no se decidió a lanzarse con auténtica decisión en pos de la victoria y el choque avanzó sin novedades, con alguna tangana y con un juego más táctico que bonito.