Antonio Barradas, aún propietario y presidente del Badajoz, ya ha expresado por escrito las condiciones para vender el club al grupo de empresarios pacenses y madrileños con los que ya llegó a un principio de acuerdo el pasado jueves. El contrato de compra-venta, un documento relativamente sencillo para la importancia que tiene una operación así, ya obra en poder de Julio del Camino y Manuel Vega, cabezas visibles de los hombres de negocios que desean hacerse cargo de la entidad. Se espera que en breve el entendimiento pueda rubricarse, aunque Del Camino se ha marchado de vacaciones tras una dura semana de negociaciones y tiras y aflojas .

Las exigencias de Barradas se reducen prácticamente a recibir 100.000 euros (16 millones de pesetas) y que los nuevos dueños se hagan cargo de las deudas del Badajoz, una cantidad que según distintas versiones podría alcanzar los seis millones de euros (mil millones de pesetas).

Después de firmarse la venta, los nuevos responsables podrán ejecutar sus planes de planificación deportiva y económica. El doble objetivo es regresar lo antes posible a Segunda y sanear financieramente el club, rescatando a la afición para ello.