Contratiempo judicial para el Cáceres 2016, que esperaba obtener de 30.000 a 40.000 euros de indemnización por la rescisión unilateral del contrato que ejercitó Tomás Bellas el pasado verano. Tendrá que conformarse en principio con 9.400, según el fallo del Juzgado de lo Social número 1 de Cáceres al que ha tenido acceso a este diario y que a buen seguro será recurrido por el club.

El juez ha considerado abusiva la petición del Cáceres, que ascendía a 45.000 euros, y que se fundamentaba en que la marcha repentina de Bellas al Gran Canaria le había obligado a incorporar a Pavel Ermolinski y Roger Fornas. Más bien ha tomado como referencia la cláusula de rescisión de Bellas, que era de 3.000 euros aunque solo si la ejercía antes del 15 de junio, a lo que ha añadido el importe de dos mensualidades de su sueldo. También ha pesado el hecho de que no sea un deportista formado en su cantera, considerando además que no le hace un daño excesivo al club por el papel que tenía a priori en la plantilla.