De forma colateral, pero real en la práctica, personajes relevantes de la sociedad cacereña habían colocado estos días al ayuntamiento en el centro neurálgico del proceso de venta abierto en el Cacereño. Le correspondía, pues, a los responsables municipales manifestar la posición del consistorio con respecto a la hipotética compra del club. Y, en este sentido, el teniente de alcalde, Santiago Pavón, deja muy claro que la postura será facilitar e impulsar la venta.

"Hay que buscar una solución y para eso estamos los políticos. En este sentido, creo que tanto Carmen Heras como yo mismo estaríamos más que dispuestos a echar una mano para que todo este proceso finalice de forma satisfactoria para la ciudad", manifiesta. Pavón apunta, sin embargo, que la labor del ayuntamiento debe entenderse como "mediadora", nunca en términos de compra de acciones.

"Ese es un asunto que no está en nuestra cabeza. En ningún caso, el consistorio debe emplear el dinero público en adquirir una entidad deportiva. Esto es algo que corresponde a otros", matiza. En opinión del máximo responsable municipal en ausencia de la alcaldesa, ayer en Madrid, "la ciudad ha dado la espalda al Cacereño y el gobierno no va a actuar de bombero en este caso".

El dirigente de Izquierda Unida añade que la función del ayuntamiento en los próximos días será "sentarse a escuchar a aquellos que tengan propuestas que hacer. Una vez que todo esté claro, intermediar para conseguir patrocinadores y demás acciones que faciliten la compra".

De la misma forma, adelanta que ya ha habido diversos tanteos al gobierno por parte de diferentes personas que podrían estar interesadas en iniciar el proceso de compra: "Ha habido contactos, todavía más indirectos que directos, pero hay gente que está intentando conocer cuál va a ser nuestra postura".

En este sentido, Pavón ´bendice´ un proyecto con tintes cacereños o regionales: "Nos sentaríamos con ellos mañana mismo para intentar respaldarles en todo lo posible".