BETIS 2: Prats, Tais, Melli, Arzu, Luis Fernández (Flores, m.75); Capi, Assuncao; Joaquín, Fernando, Denilson (César, m.88), Joao Tomás (Cañas, m.61).

VILLARREAL 1: Reina, Galván, Quique Alvarez, Ballesteros, Arruabarrena; Guayre, Senna (Josico, m.44), Farinós, Jorge López (Aranda, m.73); Víctor (Calleja, m.61) y Palermo.

GOLES: 1-0. m.18, Denilson. 2-0. m.78, Denilson. 2-1. m.83, Aranda.

ARBITRO: Iturralde González (vizcaíno). Amarilla a Luis Fernández, Galván, Arruabarrena, Tais, Josico, Assuncao y Fernando.

El Real Betis logró el triunfo en un partido con final agónico, tras recortar las diferencias el Villarreal, y una exhibición del brasileño Denilson de Oliveira, goleador de su equipo.

Con este triunfo los verdiblancos, pese a la plaga de lesiones, mantienen su balance favorable con el Villarreal, que en los últimos cinco compromisos en campo bético solo cosechó un empate (a uno), en la temporada pasada.

Solo jugadas aisladas, principalmente a cargo de Denilson y Capi, en el Betis, y de Víctor, en el Villarreal, evitaron el sopor en la primera mitad.

Denilson, en su primera jugada de mérito, a los 18 minutos, puso el uno-cero, en un balón que condujo Capi y que cedió en profundidad a Joaquín. A su centro le puso rúbrica, con habilidad y tranquilidad pasmosa, el brasileño ante la mirada de Reina.

El brasileño deleitó a los aficionados en el minuto 23, en un rápido contragolpe, con quiebro en un palmo del suelo a la zaga amarilla y chutazo cruzado junto al poste.

SEGUNDA PARTE

En el segundo tiempo el Villarreal salió con más ambición pero con menos efectividad, y tampoco los cambios le dieron otro aire, ante un Betis que quiso solventar el choque.

Capi tuvo una magnífica oportunidad que desbarató Reina con intervención prodigiosa (m.70), actuación que repitió ante Fernando (m.76), aunque no pudo hacer nada ante un empalme de Denilson (m.78), que supuso el 2-0.

Aranda (m.83) devolvió la ilusión a los castellonenses, tras contragolpe del Villarreal, al rematar desde cerca y batir a Prats, y provocó que los últimos minutos fueran de tremenda emoción.