El Cáceres inicia hoy su segunda semana de entrenamientos tras jugar el domingo en Oporto y descansar ayer. La plantilla vuelve al trabajo con su segundo compormiso a la vuelta de la esquina, mañana mismo, cuando el mismo equipo luso al que ya se ha enfrentado visite el Multiusos (20.30 horas). «Seguro que estaremos un poquito mejor», pronostica Ñete Bohigas, preparador cacereño, «satisfecho» con el trabajo de todos sus jugadores en ese primer partido de pretemporada a pesar de la derrota (83-74).

A los entrenamientos de hoy se incorporará ya el base Arturo Cruz, sustituto del polaco Andy Mazurczak, que tiene roto el quinto metatarsiano del pie derecho y estará dos o tres meses de baja. «Es un jugador experto en la LEB Plata, jugando a muy buen nivel los últimos años en todos los equipos en los que ha participado», dice Bohigas de su nuevo director de juego, del que espera «entusiasmo, ganas de trabajar y capacidad de tomar decisiones, que es como me gustan a mí los bases».

Respecto al partido del domingo en Oporto, Bohigas cuenta que fue un primer contacto positivo «teniendo en cuenta que solo hemos entrenado tres sesiones con balón». «Era lo que esperaba», añade el técnico respecto al desarrollo del encuentro, en el que el Cáceres dominó los dos primeros cuartos y bajó el ritmo a partir del tercero. «Los dos últimos [cuartos] han sido completamente diferentes, se ha notado la carga física en las piernas y hemos bajos nuestro nivel de acierto, pero era lo lógico». En líneas generales, asegura que todos los jugadores «han respondido». Ayer Bohigas, aprovechando la jornada de descanso, compartió la mañana junto a Niko Rakocevic con los usuarios de Aspainca y Down Cáceres.

Mientras, el club sigue buscando un ala-pívot para ocupar la vacante que ha dejado el norteameridano Anton Grady. La idea es incorporarlo cuanto antes, incluso esta misma semana si es posible, para que complete así la mayor parte de la pretemporada junto al resto de la plantilla verdinegra.