Ñete Bohigas, entrenador del Cáceres, reflejaba ayer en su rostro una inocultable disconformidad con la actuación de los árbitros. "Esto ya se ha convertido en una falta de respeto. Que le hagan cuarenta faltas a Jiri (Okac) y sólo piten ocho es demasiado. No importa que mida 2.17 o 1.80.", acusó. "Comentaré esta circunstancia donde deba hacerlo. Como ya no estamos arriba, se nos considera un equipo de comparsa", volvió a quejarse.

Añadió: "Nuestro objetivo es ya sumar un partido o dos para salvarnos", lamenta, descartando colarse en los play-offs. M. LAZARO