El belga Tom Boonen aspira a convertirse este domingo en el primer ciclista que gana cuatro veces el Tour de Flandes, el segundo de los cinco "monumentos" de la temporada, al que aspiran en calidad de favoritos el suizo Fabian Cancellara y el eslovaco Peter Sagan.

Desde la salida, en Brujas, 254 kilómetros de viaje y un circuito final en Ourdenaarde que volverá a ser el escenario de las últimas escaramuzas, en las que Boonen, que no ha exhibido todavía la potencia del pasado año, encontrará, previsiblemente, una dura competencia en Cancellara, Sagan y el francés Sylvain Chavanel.

El Quick Step cuenta con dos corredores de garantía: Boonen, que el año pasado conquistó la gran clásica belga por tercera vez, y Sylvain Chavanel, que acaba de confirmar su buen momento ganando los Tres Días de la Panne en Bélgica.

Cancellara, ganador del Tour de Flandes en 2010, acaba de adjudicarse la clásica E3 Harelbeke y Sagan lleva seis victorias este año, la última en los Tres Días de la Panne.

Pero el estrecho marcaje entre los favoritos puede beneficiar a los "tapados", como ocurrió en 2009 con Stijn Devolder o en 2011 con Nick Nuyens, que dieron dos victorias inesperadas al ciclismo belga.

Chavanel ha descrito la emoción que siente en una carrera como esta: "Me hace vibrar, es un espectáculo desde el kilómetro cero hasta la meta. Nada que ver con el Tour de Francia, donde todo está controlado por los equipos de los grandes líderes".

No estará en la salida el campeón del mundo, Philippe Gilbert, que se encuentra resfriado. El corredor belga del BMC precisó en un comunicado que sí tiene la intención de disputar la Vuelta Ciclista al País Vasco, del 1 al 6 de abril, como preparación del tríptico de las Ardenas (Amstel Gold Race, Flecha Valona y Lieja-Bastoña-Lieja).

El Tour de Flandes llega a su primer punto caliente en el km. 91, con la subida al Tiegemberg. En el 113 a los corredores les aguarda el Taaienberg, y a continuación el Eikenberg, Molenberg, Rekelberg, Berendries y Valkenberg, con rápidas aceleraciones entre cada ascenso.

El tercer paso por Oude Kwaremont (239 km) y Paterberg (243) puede ser la última oportunidad de eliminar a los esprinters. De ahí hasta el final, dispersada ya la fuerza de los equipos, se sucederán los ataques de los francotiradores en busca de la victoria.