Vicente del Bosque ha realizado la primera prueba para las semifinales de la Copa Confederaciones, que el jueves disputa 'la Roja' ante Italia, con David Silva y Fernando Torres como novedades en el equipo titular en el lugar de Cesc Fàbregas y Roberto Soldado, con problemas musculares.

A medida que pasan las horas, se van reduciendo las posibilidades de Cesc y Soldado de saltar al campo. Ambos jugadores que fueron sustituidos ante Nigeria y siguen ejercitándose al margen del grupo con un recuperador. En la sesión vespertina de este martes realizaron 45 minutos de estiramientos y carrera. Ellos son optimistas, pero todo indica que el seleccionador los reservará para que estén en condiciones para la final, en el caso de que España gane a una Italia sin Mario Balotelli pero posiblemente con el casi recuperado Andrea Pirlo.

Del Bosque dirigió muy participativo un entrenamiento de una hora, el último en las instalaciones del Unifor, donde 'la Roja' ha encontrado en su semana en Fortaleza unas instalaciones antiguas pero un campo en perfectas condiciones. El seleccionador corrigió continuamente a sus jugadores en un ejercicio de toque y presión, antes de dejar ver las ideas que tiene en mente para medirse a Italia.

Con la decisión del portero aparcada e Iker Casillas como favorito al puesto de titular, el técnico repartió petos para el equipo titular en el que se encontraban Silva y Torres. Por falta de efectivos, había un solo central, Gerard Piqué, y el equipo lo completaban Arbeloa, Jordi Alba, Busquets, Xavi, Iniesta, Pedro, Silva y Torres.

Este miércoles, la selección terminará de preparar la semifinal en el escenario del partido, el estadio Castelao, a las 15.15 (19.15, en España), para habituarse a la hora del encuentro. La delegación española está preocupada por el calor y la humedad de Fortaleza tras la experiencia sufrida ante Nigeria.