JAPON: Kawaguchi; Nakazawa, Kaji, Tsuboi; Ogasawara (Koji Nakata, min. 55), Alex, Inamoto, H. Nakata, Nakamura; Tamada y Maki (Tahara, min. 60).

BRASIL: Dida (Rogerio, min. 82); Cicinho, Juan, Lucio, Gilberto; Gilberto Silva, Kaká (Ze Roberto, min.70), Juninho Pernambucano, Ronaldinho (Ricardinho, min.70); Ronaldo y Robinho.

GOLES: 1-0, min. 34: Tamada. 1-1, min. 46: Ronaldo. 1-2, min. 53: Juninho Pernambucano. 1-3, min. 59: Gilberto. 1-4, min. 81: Ronaldo.

ARBITRO: Eric Poulat (FRA). Amonestó a Kaji por Japón y a Gilberto en Brasil.

Brasil comenzó ayer a parecerse a si misma y mostró parte de la fantasía que tanto se le había reivindicado tras los dos sombríos partidos realizados hasta el momento en el Mundial, aunque no despejó todas las dudas y tuvo que sufrir para sacar adelante el encuentro y el primer puesto del grupo F.

Brasil se impuso a los japoneses 1-1, que durante buena parte del encuentro se limitaron a esperar su oportunidad al contragolpe y lograron adelantarse en el marcador a la media hora de juego con un disparo de Tamada desde dentro del área.

Con un Ronaldo dispuesto a acallar las críticas por su estado de forma, un Ronaldinho más participativo, la frescura de Robinho y la amenaza de Juninho Pernambucano desde el exterior, los brasileños iniciaron el acoso a la meta asiática. Sin embargo, fue el portero japonés, Kawaguchi, quien asumió el protagonismo del encuentro con intervenciones casi milagrosas.

Brasil logró empatar al filo del descanso, cuando Ronaldinho se asoció con Cicinho y el lateral puso un balón en bandeja para que Ronaldo empatara de cabeza. Juninho y Gilberto se encargaron de rematar a Japón en la segunda parte y Ronaldo cerró la cuenta en la recta final.

Los brasileños se enfrentarán ahora a Ghana y el rival de Italia en octavos será Croacia.