España - 77: Marta Fernández (4), Torrens (19), Amaya Valdemoro (16), Montañana (12), Lyttle (22), Lima (2), Palau (2), Nicholls (-) y Martínez (-).

Bielorrusia - 68: Dureika (3), Verameyenka (20), Anufryienka (9), Marchanka (5), Leuchanka (14), Tarasava (-), Likhtarovich (2), Trafimava (8), Kress (7) y Troina (-).

Arbitros: Roberto Chiari (ITA), Felicia Andrea Grinter (USA) y Ivo Dolinek (CZE).

Marcador por cuartos: 28-15, 41-32, 62-51 y 77-68.

Incidencias: Partido por el tercer y cuarto puesto del Mundial disputado en el KV Arena de Karlovy Vary ante unos 3.000 espectadores en las gradas.

La selección española de baloncesto femenino rubricó su participación en el Mundial de la República Checa, en el que firmó el mejor resultado de su historia con el bronce al derrotar en Karlovy Vary a Bielorrusia por 77-68.

Todo un hito para el baloncesto femenino español, que hasta el momento tenía como tope el quinto puesto en Alemania-98 y China-02, sin contar un oro europeo, una plata y cuatro bronces.

Este bronce le sabe a oro a la selección española, que volvió a funcionar como bloque ante una Bielorrusia a la que dominó la mayoría del partido, aunque nunca se rindió pese a tener desventajas claras en varias fases de la contienda.

Prueba de que España volvió a ser un equipo es cómo se repartió el protagonismo. Sancho Lyttle, ausente en la semifinal por una lumbalgia, reapareció de forma estelar al lograr 22 puntos y capturar once rebotes; Alba Torrens anotó 19 puntos --17 en la primera parte--, Amaya Valdemoro 16 y Anna Montañana 12.

El inicio fue clave. España entró muy entonada a la pista y desarboló a un equipo serio y siempre peligroso como Bielorrusia. El 28-15 al final del primer cuarto era ejemplo palpable.

CON SOLIDEZ Bielorrusia, no obstante, siguió metida el partido e impidió la sentencia prematura. La labor de Leuchanka y Verameyenka propició, junto a la segunda falta de Sancho Lyttle que el marcador se acortara hasta el 41-34 con el que se llegó al descanso pese a la espectacular actuación de Torrens.

Bielorrusia forzó más la máquina al inicio del segundo periodo. Coincidió con un bajón en el nivel de intensidad de España y las pupilas de Anatoly Buyalski se situaron con un emocionante 46-45 a los 24 minutos. Pero la reacción no encontró el fin. Nunca se pusieron por delante en el marcador y una zona 2-3 y los triples de Montañana y Valdemoro de nuevo dispararon a España, que encaró el último parcial con nueve puntos de ventaja (62-53), ya definitivo.