ITALIA: Buffon; Zambrotta, Panucci, Chiellini, Grosso; Pirlo, De Rossi, Camoranesi (Ambrosini, m.85); Perrotta (Cassano, m.57), Del Piero (Quagliarella, m.76), Toni.

RUMANIA: Lobont; Contra, Tamas, Goain, Rat; Radoi (Dica, m.25), Petre (Nicolita, m.60), Codrea, Chivu; Daniel Niculae, Mutu (Cocis, m.88).

GOLES: 0-1: m.55: Mutu, 1-1: m.56: Panucci

ARBITRO: Tom Henning Ovrebo (Noruega). Amonestó al italiano Pirlo (m.61) y De Rossi (m.92) y a los rumanos Mutu (m.43), Chivu (m.58), Goian (m.73).

INCIDENCIAS: Partido de la segunda jornada del grupo C. disputado en Zúrich.

Gianluigi Buffon, con otra actuación determinante y el rechace de un penalti lanzado por Adrian Mutu en el minuto 82, mantiene con vida a una pobre selección italiana, que se vio en desventaja y no pudo más que empatar ante una Rumanía que puede maldecir la oportunidad desperdiciada.

Rumanía lo tuvo todo para ganar, pero le faltó convicción. Italia fue muy poco campeona del mundo, pero cuenta con jugadores para jugárselo todo a un carta en la última jornada.

Cuenta, sobre todo, con Buffon, que tras las críticas recibidas por el partido ante Holanda (3-0) volvió a demostrar por qué lleva tanto tiempo en la cumbre y fue determinante en el punto sumado por su equipo.

El campeón del mundo no asustó al rival; al contrario, fue una Rumanía mucho más decidida que la que debutó contra Francia la que mereció ponerse en ventaja en el marcador en un arranque espectacular.

Si la selección italiana llegó indemne a la media hora de encuentro fue por la actuación de su portero, que desbarató una gran ocasión de Adrian Mutu, primero, y poco después con un golpe franco lanzado por el ex jugador del Celta Gabriel Tamas.

A la tercera, fue el poste el que repelió un libre directo de Cristian Chivu, pero no eran buenos presagios para un equipo que quería dominar el juego, que había alineado jugadores para imponer su ritmo.

El equipo de Donadoni alcanzó el descanso aliviado, pero en el segundo tiempo Mutu aprovechó un error de Zambrotta para batir a Buffon (m.55).

Encorajinada, la selección italiana respondió de inmediato, por medio de Cristian Panucci, el goleador oportuno, tan sólo un minuto después de que marcase Rumanía.

No se libró, sin embargo, del temor al desastre, que pudo llegar en el minuto 82, cuando Panucci derribó dentro del área a Daniel Niculae. Mutu vio demasiado pequeña la portería y Buffon se agrandó hasta despejar el balón, para mantener vivo a su equipo, un campeón del mundo que ya no asusta a casi nadie.