CACEREÑO - 1: Vargas, Palero, Dani Pérez, Mejías (min. 85, Carlos Maldonado), Pizarraya, Iván Pérez (min. 67, Elías), Checa, Aarón, Valverde, Gaspar y José Ramón (min. 57, Toni).

SAN FERNANDO - 1: Valle, Eder, Gasca, Jorge, Pele, Germán, Iván, Berni (min. 58, Urri), Ernesto (min. 70, Angel), Ocaña (min. 87, Fuster) y Sebas.

GOLES: 0-1-Min. 71: Jorge. 1-1-Min. 93: Aarón.

ARBITRO: Villena Contreras (Castilla-La Mancha). Amarillas a los locales Aaron y Mejías y roja a Pizarraya (min. 82); en los visitantes dos amarillas a Gasca (roja en el 91) y una a Eder.

Corría el minuto 93, el partido agonizaba y el Cacereño se dejaba el alma y los puntos ante el San Fernando, que no había ganado aún fuera. El cabezazo de Aarón a córner botado por Elías supuso el 1-1. Un punto es un punto, especialmente en Segunda B, y lograr un empate cuando no se cuenta con él equivale casi a una victoria moral.

La positiva lectura de la igualada verde toca la fibra anímica en el análisis a posteriori. Llega el último partido de la primera vuelta en Cádiz (viernes, 20.30 horas), se inicia hoy mismo la campaña de abonados y la carta de presentación, tras la goleada en Guadalajara y lo de ayer, hubiera sido pobre. Sin embargo, este equipo tiene arrestos y hambre y, mermado o superado, no se rinde. Acumular 29 puntos al filo del término de la primera vuelta es un botín notable.

Tuvo el CPC un partido áspero. La clasificación del rival es engañosa, por puntuación y por hechuras. Durante los 20 primeros minutos zarandeó a su rival, al que apenas dejó tocar bola. Y eso que el equipo departamental no había hecho noche en Cáceres, sino que había partido desde las seis de la mañana. Mucho mérito, mucha modestia, mucho dominio ante un rival que parecía el que había madrugado.

El colegiado, eso sí, ayudó a los visitantes. Omitió un penalti palmario a Aaron (min. 19) y otro a Gaspar (min. 32). El Cacereño, con Checa más despistado de la cuenta y sin llegar bien al corte --toda una noticia-- se conectaba mal. Apenas creó peligor, en cualquier caso, el San Fernando, confiado al virtuosismo de Sebas, un extremo filigranero con el que el siempre eficaz Rubén Palero lo tuvo difícil.

GRAN VALVERDE Oscurecido también la talentosa zurda de Gaspar, el cuadro local confió su ofensiva a Carlos Valverde, de largo el mejor de los 28 jugadores que saltaron al terreno de juego del Príncipe Felipe ayer. El 'utrerano de Valdefuentes' dio un curso acelerado de avances por banda, aunque sus centros no encontraron nunca rematador. José Ramón, que volvía al equipo --con Toni sacrificado en el banquillo-- no culminó una sola jugada de peligro, quizá desubicado como '9'.

Sin embargo, el Cacereño fue ganando terreno, serenando su juego y acercándose con cierta comodidad al área de Valle, siempre muy seguro por alto, la única fórmula utilizada por los verdes, confiados de nuevo en el juego de estrategia que tan buenos réditos le está dando a lo largo de la temporada.

Precisamente la acumulación de malas noticias se produjo en el inicio del segunda mitad. José Ramón volvió a romperse, previsiblemente con una contractura, y tuvo que retirarse en el minuto 57. Toni, a escena.

Dominaba el Cacereño, y su oponente apenas salía a la contra, en un partido sin apenas opciones en las respectivas porterías. Tras un lanzamiento a balón parado hacia la meta de Vargas, Gaspar despejó para atrás y el central Jorge, muy atento, batió al meta local en su salida (0-1, min. 71).

Los verdes, ya con Elías en el campo, se lanzaron a la ofensiva para, al menos, empatar el choque. Una posibilidad que se vio aparentemente diluida con la absurda acción de Pizarraya, que golpeó a un rival sin balón. El lateral, que después pediría perdón en un gesto de humildad, dejó a los locales con 10 a los 82 minutos. Un par de minutos antes, Valle había sacado un cabezazo de la raya de gol de forma inverosímil a Mejías.

Las ganas suelen tener premio. Y en el CPC lo encontró en lo estertores, con la gente ya marchándose del estadio, impotente en su ánimo. Elías botó un córner y Aarón peinó para el 1-1. Gran premio para el zurdo, que no podrá estar tampoco en Cádiz por ver su quinta tarjeta. El San Fernando ya jugaba con 10 hombres también por la roja, tras dos amarillas, del lateral Gasca, a quien Valverde superó por enésima vez. Restaba aún tiempo para completar el giro completo, pero no pudo ser.