Con caras de cansancio tras la larga celebración durante la madrugada llegaron ayer jugadores, cuerpo técnico y directivos del Cacereño al Santuario de la Virgen de la Montaña, donde hicieron una ofrenda floral a la patrona como muestra de agradecimiento por el ascenso a Segunda B logrado el domingo, un éxito que quieren compartir con toda la ciudad.

Allí escucharon al padre José María Batuecas, capellán colaborador del santuario, que además de felicitarles "por este ilusionante saltito para toda la ciudad", les habló del valor del equipo, del trabajo en grupo y del sacrificio, para a continuación animarles a aspirar "ahora a metas mayores".

Con esas palabras el capellán emuló al máximo accionista del club, que el domingo en la plaza Mayor, cuando el equipo fue recibido por unas 3.000 personas al grito de campeones, aseguró a Efe que "una afición así es para aspirar a cotas aún mayores, porque desde luego te estimula seguir trabajando".

FELICITACIONES Ayer fue día de felicitaciones para el club. Los mensajes llegaron de muchos lados, como el Ayuntamiento de Cáceres o el Consorcio Cáceres 2016, que hizo especial énfasis en el trabajo que ha realizado el club durante tota la temporada y por haber conseguido "entusiasmar a la afición local".

Mientras, los jugadores disfrutaron ayer de una comida conjunta antes de marcharse de vacaciones ("las necesitamos, esta fase de ascenso ha sido muy larga", aseguraban mientras esperaban en el santuario), lo que muchos harán con su futuro todavía en el aire. Ahora ha llegado el momento de que el equipo dirigido por Martínez Doblas y Angel Marcos empiece a planificar la próxima temporada.

"Hace un año --subrayó Martínez Doblas-- que nos hicimos cargo del club, y ya entonces prometí que trabajaríamos con todas nuestras fuerzas por lograr el ascenso, y lo hemos conseguido, ahora solo queda, después de celebrar esto como se merece, planificar la próxima temporada con detenimiento, para que las cosas vayan igual de bien la próxima campaña".

La planificación deberá ser rápida, sobre todo teniendo en cuenta que hasta ahora no se ha hecho nada, como reconoció el máximo accionista hace unos días, que dijo que todo estaba parado en espera de si se lograba el ascenso o no.

El ascenso se ha logrado y ahora hay que preparar un proyecto competitivo para Segunda B. La temporada empieza a finales de agosto y la pretemporada lo hará, previsiblemente --aunque aún no se han fijado las fechas-- antes de que acabe julio, por lo que Doblas y Marcos tienen un mes escaso para preparar el que será el equipo de la próxima campaña en la categoría de bronce del fútbol español, a la que el Cacereño regresa después de cinco campañas en el infierno de la Tercera División.