El Cacereño espera seguir subido a la ola más positiva de lo que va de temporada. Tras completar un mes de octubre sin derrotas y reflotándose en la clasificación, los verdes acuden hoy al estadio del Sanluqueño (17.00 horas) con la esperanza de continuar en la buena línea.

La conocida fiabilidad fuera vuelve a estar a prueba. El conjunto de Angel Marcos solo se ha vuelto sin sumar de su desplazamiento a Albacete. Si a eso le ha unido un par de resultados positivos en casa, la consecuencia es incrustarse en la zona media, con 15 puntos, aún algo lejos del cuarto clasificado (Guadalajara, 22), pero también con cierto margen respecto a la zona de descenso (Almería B, 9).

El regreso de José Gaspar a la cita marca la previa. El equipo ha aprendido a vivir sin su futbolista más creativo, pero no le vendrá nada mal volver a tenerle disponible, sobre todo ahora que se ha lesionado Raúl Medina, otro generador de juego. Carrizosa estará en el banquillo tras semanas de ausencia, quedándose fuera respecto al choque ante la Balona Fodé Mansaré y el canterano Alcala. En la lista también está Martins, baja en algún entrenamiento por su resfriado.

El técnico no se fía del Sanluqueño, decimocuarto con 14 puntos, pese a asumir que "si miramos solo las tres últimas jornadas, es un desastre". Sí: 4-0 frente a Sevilla B y La Roda y 0-3 en casa contra el Cartagena. "Encajar 11 goles y no meter ninguno no es normal. Pero que nadie piense que va a ser fácil. Tienen un gran plantel, con jugadores expertos", apuntó. Una clave será "jugar con la ansiedad del rival" y, "tener mucho el balón, que no se crezcan. Además, el de allí es un público que aprieta".

También alertó sobre la "confianza mal entendida" que puede ocasionar en el CPC su racha, "que nos creamos superiores". "La confianza tiene que ser en positivo", agregó.