La vuelta del Cacereño a Segunda División B tendrá una característica principal: el bloque de futbolistas que ha conseguido el ascenso tendrá continuidad. Muchos jugadores van a seguir. En ello coinciden el máximo accionista, Antonio Martínez Doblas, y el que, salvo sorpresa de última hora, seguirá siendo el entrenador, Angel Alcázar.

Tanto Doblas como Alcázar, que aún no han plasmado una más que probable renovación, hicieron la misma lectura ayer. "Espero que siga gran parte de la plantilla", dijo el técnico. "Tenemos que estudiar muchas cosas, pero yo confío en que la gran mayoría se quede; se lo merecen", juzgó el empresario segedano, quien, tras cerrar la continuidad del técnico, empezará a hablar con los futbolistas a través del director general y hombre de confianza absoluta en el club, Angel Marcos.

El Cacereño 2009-2010 tendrá caras nuevas en determinados puestos para completar la plantilla, aunque no es ésta la prioridad ahora. "Tendríamos que apuntalar la plantilla en algunas posiciones en las que nos hemos quedado cojos, como en algún lateral", dijo Alcázar, que esperaba tener el contacto definitivo con Doblas en breve espacio de tiempo. "Hay que tener en cuenta que en 20-25 días tendríamos que estar trabajando", sugirió un técnico que seguiría con el proyecto "encantado".

Mientras tanto, a Martínez Doblas le llueven los ofrecimientos de técnicos, "algunos de ellos realmente buenos", pero él sigue insistiendo en continuar con el de Herrera del Duque, "que se lo merece más que nadie".

Cuando se concreten los contactos con los jugadores a los que se pretende renovar, llegará el momento de los fichajes, que se pretenden de "mucha calidad". Hombres como Luismi (aún propiedad del Espanyol) o Antonio (Toledo) están entre los futuribles. Javi Ramos (Imperio) y Juanma (Granada 74) pueden estar muy cerca. El gran sueño sería el extremo Enrique (Cádiz), hoy por hoy una misión casi imposible tras el ascenso cadista a Segunda División.