Finalmente no lo hará, pero lo ha estado pensando muy seriamente. El Cacereño ha estudiado enviar una petición formal a la Federación Española de Fútbol para que no le volviesen a pitar árbitros gallegos.

"Sí, íbamos a hacerlo, pero al final nos vamos a centrar en intentar ganar partidos y salvarnos, sin más", reconoció ayer a este diario Antonio Martínez Doblas, consejero delegado del Cacereño, respaldando así al entrenador, José Luis Montes, que durante el último mes ha insistido en las suspicacias derivadas de que colegiados gallegos piten al Cacereño estando involucrados cuatro equipos de esa comunidad (Deportivo B, Coruxo, Montañeros y Pontevedra) en la lucha por el descenso.

En los dos últimos desplazamientos (Real Madrid Castilla y Universidad de Las Palmas) han dirigido los partidos colegiados gallegos, algo que a Montes le parece una "vergüenza". Ahora se pide calma en el club y concentrar todos los esfuerzos en conseguir cuanto antes los puntos necesarios para la permanencia en Segunda División B.

Doblas tiene una cifra: 46 puntos, uno más que el pasado año. "Creo que lo vamos a lograr", dice el empresario segedano. "A ver si tenemos una racha buena, pero hay que marcar goles", proclama a modo de deseo.