Entre Cáceres y Yecla hay, por el camino más corto, 554 kilómetros, unas nueve horas de autobús. Pero eso no hace que los más fieles hinchas del Cacereño se arruguen. Es probable que los jugadores verdes no estén solos en el primer partido de la eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda División B, ya que el club gestionará esta semana la contratación de al menos un bus para que sus seguidores más arrojados puedan estar cerca del equipo en el choque que se disputará en la tarde del domingo.

La eliminatoria contra el Yeclano empieza a levantar pasiones en Cáceres. Representantes de una veintena de aficionados se dirigieron ayer al club para agilizar las gestiones del viaje. La respuesta de su director general, Angel Marcos, fue abrir un plazo de inscripción en el bingo del Cacereño, situado en la Avenida de Portugal, para comprobar qué número de hinchas estarían dispuestos a emprender un recorrido que empezaría en la madrugada del sábado al domingo y concluiría de regreso casi en la mañana del lunes.

La voluntad del Cacereño es facilitar tanto el desplazamiento como la entrada al precio más asequible posible, pero para ello tiene que recabar distintos apoyos y asegurarse de que al menos ese primer autobús no iría medio vacío.

GUERRERO, BIEN Mientras, ayer se confirmó la buena noticia de que el defensa Lolo Guerrero no tiene una lesión de importancia en su tobillo derecho, luxado en el tiempo de descuento en el partido ante el Imperio. La fuerte torcedura se le redujo en el propio Estadio Romano e incluso podría contar para Angel Alcázar ante el Yeclano. Es precisamente la defensa la línea más debilitada del equipo después de la lesión de Borja Collado para lo que queda de temporada.

El Cacereño aún no ha decidido ni día ni horario ni precio de localidades del partido de vuelta, aunque es seguro que coincidirá con las ferias.