El Cacereño-Arroyo de dentro de dos semanas se jugará en El Cuartillo, salvo que la Federación Española dé el visto bueno al cambio de escenario, algo que ha denegado en principio, y se pueda disputar en el Municipal arroyano.

El club confirma esta tarde que vuelve al Príncipe Felipe, aunque las gestiones y las obras que tendrán que hacerse en el terreno de juego hacen que sea inviable llegar a tiempo en el recinto de la carretera de Salamanca para el derbi.

La entidad pide a sus socios y aficionados "entendimiento y paciencia, pues la decisión de la vuelta al Príncipe Felipe es compleja, pero es el deseo de todos" y que se necesita tiempo para "adecentar nuestro estadio y buscar una viabilidad económica que garantice el futuro del club".

Las gestiones para que se juegue en la Ciudad Deportiva, al menos provisionalmente, han fracasado.