Visiblemente más relajado que hace siete días, el Cacereño visita esta tarde (17.00 horas, estadio Nueva Victoria) al Real Jaén. Si los verdes se llevan los tres puntos que hay en juego --o incluso uno-- habrán confirmado que las sensaciones positivas que dejó el triunfo ante el Polideportivo Ejido son reales. Si no es así, tocará seguir sufriendo y mirando más hacia abajo que hacia arriba, que es aparentemente el sino de este equipo durante las últimas temporadas en Segunda División B.

DATOS SIMILARES Es un partido de una dificultad alta, nadie lo duda, pero con un premio de prestigio extra en el horizonte. Aparcados por ahora sus problemas económicos, el Jaén ha empezado la liga muy decentemente (es séptimo con 18 puntos) y presenta un equipo sólido, al que no resulta fácil hacerle goles (10 encajados), pero al que también le cuesta marcar (10 también). Podría pensarse que existe claro paralelismo con el Cacereño en este sentido (10 goles a favor y 12 en contra). El 3-2 del pasado domingo es una rareza en todos los sentidos.

Pedro Pablo Braojos, entrenó al Jaén en Segunda División hace once años, ha tenido una semana tranquila para trabajar y además lo ha hecho con todos sus jugadores, a excepción de Samuel, que con unas molestias es seria duda para hoy. Su puesto en el lateral izquierdo lo ocuparía Dieguito. En el otro flanco de la defensa tampoco estará el titular, Rubén Palero, que está sancionado por acumulación de amonestaciones. Jaraíz será el '2'. Otra más que posible alteración en la zaga es el regreso del jefe Tomás por Gonzalo.

De medio campo hacia adelante no parece que vaya a haber cambios, aunque nada pueda descartarse. Mena sigue aspirando a desbancar a Pedro o Alex en ataque, pero está derivando a recurso para las segundas partes, lo mismo que Santi Amaro.

No es una ciudad que se le dé bien históricamente al Cacereño. De trece visitas, ha perdido en nueve, ha empatado en tres y solo ha ganado en una (temporada 2002-03, 1-2 con Ismael Díaz en el banquillo.