El Cacereño confirmó ayer oficialmente la rescisión del contrato de mutuo acuerdo con Ismael Barragán, después de que el futbolista no fuera inscrito para la competición liguera, pese a ser uno de los últimos fichajes.

La llegada de los dos guineanos, Bondoura y Mansaré, ha provocado esta situación que, al menos aparentemente, ha tenido final feliz para las dos partes. El club abonará lo correspondiente a dos meses al jugador y éste podrá encontrar otro destino donde poder ser útil. En principio, podría ir al 'nuevo' Xerez.

Mientras tanto, el CPC juega esta noche en Jerez partido de semifinales de la Copa Federación. Marcos hará probaturas de cara al encuentro del próximo domingo en Lucena. En principio será baja el zurdo Gaspar, que pese al optimismo que reinaba en cuanto a su recuperación todavía arrastra molestias en tanto se está haciendo pruebas. Ayer se cruzaban los dedos en el club para que sus problemas de rodilla, producto de un golpe la semana pasada en un entrenamiento, no vayan a más y pueda estar en la próxima jornada liguera.

La sensación en el equipo sigue siendo buena. El problema de los dos encuentros perdidos en El Cuartillo tiene solución, según el técnico, que achaca a lagunas en la concentración la causa mayor de las derrotas.